Fueron cinco días en que niños, niñas y jóvenes de 5 a 18 años cambiaron sus actividades de verano por deporte, y pudieron aprender en forma entretenida aspectos básicos del balompié junto a la “Escuela Porteros Halcón Garcés”. Los monitores de fútbol y staff de kinesiólogos y profesores de educación física, les enseñaron además sana convivencia y fair play, trabajo en equipo y autocuidado.
Desde las dos de la tarde, se veían en el campo de juego varias figuras como el volante venezolano y del CDA, Eduard Bello, Waldo Ponce, Felipe Flores, Michael Lepe y Gonzalo Fierro compartiendo con los menores.
La gerenta general de FCAB, Katharina Jenny, destacó que ‘a través de esta iniciativa, queremos ampliar y reforzar nuestros vínculos con las comunidades donde operamos, relevando la importancia de hacer deporte en edad temprana’. ‘Respondemos a un anhelo profundo de los propios vecinos, y convocamos a una gran cantidad de escuelas de fútbol, para incentivar la práctica de este deporte en equipos mixtos, propiciar nuevos lazos de amistad y animarlos a seguir perfeccionándose, a la vez que comparten con futbolistas reconocidos’ expresó.
Arturo Loyola, entrenador de la Escuela de Fútbol Estrella del Oriente, comentó que gracias a esta iniciativa, 30 niños accedieron a esta clínica inédita: ‘Hace 10 años emprendimos esta entidad como una forma de darles a los pequeños herramientas contra el ocio y situaciones vulnerables. Esta clínica va en la misma línea de apoyar a familias en situaciones muchas veces de riesgo o que no pueden salir de vacaciones en época estival’.
La madre de una de las niñas beneficiadas de la Escuela Halcón del Oriente, Elena Seriche, dijo que “me encanta esta iniciativa. Yo siempre acompaño y apoyo a mi hija, así que resulta una instancia espectacular y sana”. Luciano Hernández (11 años), uno de los niños que asistió a la clínica, afirmó que “vine con mis amigos a aprender más de fútbol, a mejorar mis jugadas. Siempre quise conocer y sacarme una foto con Eduard Bello, y ya lo conseguí, por lo que estoy muy feliz, aunque no entiendo cómo juega tan bien al fútbol con ese pelo”.
Mientras Eduard Bello, volante del CDA, motivó en todo momento al grupo: “Es súper bonito que el mundo privado, en este caso la empresa FCAB, realice este tipo de actividades, entendiendo que los niños necesitan apoyo real para lograr sus sueños. Y más bonito que ellos aprovechen con humildad y de la mejor forma la oportunidad que significa esta clínica de fútbol”, indicó.
Al término de las cinco jornadas, los 150 niños fueron reconocidos en el mismo campo de juego por su esfuerzo y ganas de aprender.
Desde las dos de la tarde, se veían en el campo de juego varias figuras como el volante venezolano y del CDA, Eduard Bello, Waldo Ponce, Felipe Flores, Michael Lepe y Gonzalo Fierro compartiendo con los menores.
La gerenta general de FCAB, Katharina Jenny, destacó que ‘a través de esta iniciativa, queremos ampliar y reforzar nuestros vínculos con las comunidades donde operamos, relevando la importancia de hacer deporte en edad temprana’. ‘Respondemos a un anhelo profundo de los propios vecinos, y convocamos a una gran cantidad de escuelas de fútbol, para incentivar la práctica de este deporte en equipos mixtos, propiciar nuevos lazos de amistad y animarlos a seguir perfeccionándose, a la vez que comparten con futbolistas reconocidos’ expresó.
Arturo Loyola, entrenador de la Escuela de Fútbol Estrella del Oriente, comentó que gracias a esta iniciativa, 30 niños accedieron a esta clínica inédita: ‘Hace 10 años emprendimos esta entidad como una forma de darles a los pequeños herramientas contra el ocio y situaciones vulnerables. Esta clínica va en la misma línea de apoyar a familias en situaciones muchas veces de riesgo o que no pueden salir de vacaciones en época estival’.
La madre de una de las niñas beneficiadas de la Escuela Halcón del Oriente, Elena Seriche, dijo que “me encanta esta iniciativa. Yo siempre acompaño y apoyo a mi hija, así que resulta una instancia espectacular y sana”. Luciano Hernández (11 años), uno de los niños que asistió a la clínica, afirmó que “vine con mis amigos a aprender más de fútbol, a mejorar mis jugadas. Siempre quise conocer y sacarme una foto con Eduard Bello, y ya lo conseguí, por lo que estoy muy feliz, aunque no entiendo cómo juega tan bien al fútbol con ese pelo”.
Mientras Eduard Bello, volante del CDA, motivó en todo momento al grupo: “Es súper bonito que el mundo privado, en este caso la empresa FCAB, realice este tipo de actividades, entendiendo que los niños necesitan apoyo real para lograr sus sueños. Y más bonito que ellos aprovechen con humildad y de la mejor forma la oportunidad que significa esta clínica de fútbol”, indicó.
Al término de las cinco jornadas, los 150 niños fueron reconocidos en el mismo campo de juego por su esfuerzo y ganas de aprender.
