25 locales de comida rápida de Mall Plaza Antofagasta se sumaron a la campaña #ChaoBombillas, una iniciativa del Ministerio del Medio Ambiente que busca crear conciencia sobre el uso de éstas.
El seremi de Medio Ambiente, Rafael Castro, explicó que la campaña está enfocada en hacer un llamado de atención a la ciudadanía ‘para tomar conciencia de lo que estamos haciendo con nuestro entorno’ en particular en esta región, donde existen las playas más contaminadas por metro cuadrado.»La idea es avanzar, dar un paso, así como el 3 de febrero empezamos a prohibir las bolsas en el gran comercio, la idea es que nosotros estemos un paso más allá» agregó.
A diferencia de la Ley de bolsas Plásticas, esta campaña es de un carácter voluntario, donde se incentiva a los locales comerciales y a las personas a reducir la utilización de plásticos de un solo uso. Una vez que un local adquiere el sello de #ChaoBombillas, este se compromete a entregarlas a pedido del cliente, ideal en caso de emergencia. Por ejemplo: para adultos mayores, niños o personas con capacidades diferentes.
Según expresó la gerente de Mall Plaza Antofagasta, María Cecilia Díaz, la recepción de la comunidad antofagastina ha sido positiva. También añadió que el cien por ciento de los locales del centro comercial están comprometidos. «Muchos ya comenzaron con esta causa desde hace un tiempo, buscando alternativas y también concientizando a la comunidad» concluyó.
Un mal innecesario
La vida útil de una bombilla plástica es de aproximadamente 15 minutos y luego tarda más de 200 años en descomponerse. En promedio una persona utiliza 38.000 bombillas plásticas a lo largo de su vida, se recogen 400.000 unidades de los océanos todos los años, que causan la muerte de millones de especies marinas.
Las bombillas de plástico están hechas de polipropileno, un derivado del petróleo. En teoría se trata de un material reciclable, pero en la práctica no logra ser efectivo. En el caso de las bombillas, éstas no se pueden reciclar porque gracias a su tamaño caen de las máquinas clasificadoras y se mezclan con otros materiales.
Otra desventaja es que al no ser biodegradable, cuando el plástico se descompone se transforma en miles de partículas y esas partículas hacen el recorrido que hace el agua normalmente y finalmente llegan a nuestro sistema. «No está medida cuál es la cantidad de microplástico que nosotros consumimos» comentó el seremi de Medio Ambiente.
Una alternativa amigable
Durante los últimos años, gracias a la tecnología y el acceso a la información, se han vuelto una tendencia las cuatro erres del reciclaje: Reducir, Reutilizar,Reciclar y Recuperar. Bajo esa misma filosofía se han creado alternativas amigables con el entorno para evitar el plástico de un uso, entre otros. Dentro de éstas existen las bombillas de acero inoxidable, de bambú, de vidrio, de goma y de papel.
En Antofagasta las puedes encontrar en: