Junta de vecinos del sector plaza Pablo Neruda pide que el municipio se haga cargo de ese punto crítico para la seguridad

Ante la denuncia de vecinos sobre los asaltos que estaban ocurriendo en la plaza Pablo Neruda, la semana pasada el delegado de Carabineros de esa zona envió un oficio solicitando un operativo en el área de la denominada “casa del terror”, ubicada en la costanera centro norte de Antofagasta. Pero el mismo día que el documento fue remitido a la municipalidad y la Delegación Presidencial Regional, en la estructura de la plaza que permanece en abandono descubrieron un cuerpo. La víctima, quien todavía no es identificada, murió a manos de un sujeto que la hirió gravemente, mientras que un segundo prendió fuego al colchón en el que dormía para borrar los rastros del crimen.

Yasna Morales, presidenta de la junta de vecinos Norte 38, la cual en la costa corresponde al sector de la plaza Pablo Neruda, aseguró que dicho lugar es un punto crítico de seguridad para los 5.800 habitantes que representa. “El gran problema que tenemos ahí es que ocurren asaltos y cuando roban en otro sitio es el primero punto al que van a refugiarse. Los vecinos viven con temor constante, porque nadie puede ir al parque por ese riesgo, de noche está oscuro y por lo general está lleno de rucos. Hace dos años, a unos 200 metros de ahí hubo otro crimen, el de Ángel (adolescente de 16 años). Además, hay muchas incivilidades que hacen ese sector más peligroso todavía”, detalló.

Morales explicó que esta situación no solo es responsabilidad de la alcaldía actual, porque la “casa del terror” es una estructura que lleva totalmente abandonada durante años. La presidenta expuso que desde antes que comenzara la pandemia ese lugar está ocupado por la delincuencia. También mencionó que los portones tienen candados que los colocan las mismas personas que se apropian del lugar, porque el espacio es como si tuviera piezas que probablemente en un principio serían destinadas a locales comerciales.

Considerando la sensación de inseguridad, Morales manifestó que algo que dejaría tranquilidad es que “primero, la alcaldía se haga cargo, que ese lugar lo entregue a quien quiera administrarlo, porque esperar a que lo derriben es pedir demasiado. Cuando sucedió este homicidio, Felipe Guzmán (director municipal de Planificación) dijo que ahora se harían cargo como municipio y que arrendarían el espacio. Sin embargo, eso nos pasa siempre cuando tenemos este tipo de cosas y después seguimos en lo mismo, un abandono total”.

La plaza, agregó, en otro tiempo era un lugar de visita para los vecinos, la gente iba a despejarse, a caminar y se empoderaba de ese espacio público, pero ¿ahora quién quiere ir allí si siempre se ven peleas o robos?, cuestionó.

También precisó que se han realizado muchos operativos y tiene los oficios que envía el delegado de Carabineros de su zona. El último, con copia al municipio y la Delegación Presidencial Regional, justamente se envió el mismo día que se descubrió el homicidio, porque los vecinos denunciaban que había asaltos.

“Ese lugar le pertenece a la municipalidad»

“Cuando se hacen los operativos sacan a las personas, pero vuelven constantemente porque el lugar está abandonado. La alcaldía tiene que poner mano dura, en el sentido de que ese lugar le pertenece a la municipalidad de Antofagasta. Recuerdo que también hace unos tres años encontraron a una persona con alambres en el cuello, era un chico de mi sector, de calle Tarapacá, fue horroroso”, señaló Morales. La información que manejan es que cuando construyeron esa estructura en la plaza su finalidad era para el arriendo, porque es una galería que probablemente fue pensada como áreas de esparcimiento o de comida, pero aquello nunca se concretó y por ello siempre quedó en abandono.

En ese sentido, la presidenta de la junta de vecinos declaró que El Vivero Municipal es otro punto que está en las mismas condiciones. “Lo cierran, vuelven a abrirlo y hemos levantado oficios porque siguen vendiendo droga. Lo que nos responden desde la municipalidad es que no nos preocupemos, que verán el tema, pero sigue todo igual”, declaró.

Morales precisó que, tras el crimen, volvieron a levantar oficios para solicitar rondas. “En estos días no creo que vinieran porque nos habrían informado. Sé que vendrán operativos, sacaran a las personas que están ocupando la estructura, pero al estar en total abandono, regresarán de nuevo y tendremos lo mismo de siempre”, cuestionó la dirigente.