La alcaldesa de Antofagasta, Karen Rojo, al comienzo de su administración, había trazado una meta clara: recuperar la Plaza Sotomayor de los vendedores ambulantes que ahí se instalaron – y se masificaron – tras la administración de la ahora diputada Marcela Hernando. Para ello, el nombre que designó fue el del ingeniero Antonio Sánchez. Figura que desde un comienzo fue rechazada por quienes desempeñaban sus labores en esa plaza por la postura que había hecho pública Sánchez en contra de los ambulantes con anterioridad a asumir como funcionario de la municipalidad. Misión que no pudo concretar pues hoy dejó sus funciones tras presentar su renuncia a la alcaldesa de Antofagasta.
Dentro de los motivos que habrían llevado a Sánchez dejar la oficina de Fomento Productivo de la cual estaba a cargo y dependen los permisos para los ambulantes, estaría la carga horaria que esta labor significaba. Antonio Sánchez era la última figura del gabinete original de la alcaldesa Karen Rojo que desempeñaba sus funciones en la casa consistorial y quien habría sido parte del círculo de poder más cercano a la máxima autoridad comunal de Antofagasta.
La renuncia de Sánchez se suma a las ya conocidas de Fabrizio Queirolo, Gino Pérez, Rafael Mella, Irina Salgado, Claudia Meneses, entre otros. Cabe señalar que del gabinete original, el ahora ex jefe de fomento productivo, era el último de los nombramientos originales que quedaban en el círculo cercano de Karen Rojo.
