Por 15 votos a favor, 1 en contra y 2 abstenciones, la Comisión de Medio Ambiente de la Convención Constitucional aprobó en general la norma elaborada por el astrónomo de la Universidad de Antofagasta, Eduardo Unda-Sanzana, para declarar la atmósfera un “bien natural común” y otorgarle protección en la nueva carta fundamental.
La iniciativa, que tuvo en la convencional constituyente, Cristina Dorador, su principal patrocinadora, pasará ahora a un periodo de indicaciones y votación de las mismas, para luego ser presentada al pleno de la asamblea a fin de asegurar su presencia en el texto final.
Tras la aprobación del texto, el astrónomo manifestó que ésta es una ocasión de orgullo regional, pues la iniciativa nacida en Antofagasta se vuelve la primera en ser aprobada en general en todo el proceso de la Convención Constitucional.
“El rol de la doctora Cristina Dorador, como convencional constituyente que patrocinó la iniciativa, y mi propio rol, escribiéndola en el marco del Grupo de Expertos Autoconvocados, GEA, formado inicialmente por académicos de la Universidad de Antofagasta e integrando luego a colegas de otras universidades del norte de Chile, da cuenta de la vocación territorial que existe detrás de esta iniciativa”, precisó el astrónomo de la UA.
Unda-Sanzana dijo que la contundente votación en general lograda en la comisión es un muy buen indicador para los trámites que vienen, y agregó que con esta norma “tenemos la oportunidad de dar una señal poderosa y pionera de que Chile considera tan importante esta materia (la protección de su atmósfera) que la incluye en su Constitución de manera explícita”.
Propuesta
La propuesta aprobada detalla que el Estado reconoce a la atmósfera como un “bien natural común”, el cual comprende “desde el aire que respiran sus habitantes hasta el cielo a través del cual éstos ven el espacio”, añadiendo que “la protección y restauración de sus características naturales son objetivos de interés público y las tareas necesarias para su logro, son deberes del Estado”.
La moción añade que “todas las personas y comunidades tienen derecho al disfrute de una atmósfera libre de cualquier tipo de contaminación”, de la misma manera que “toda persona, de forma individual o colectiva, tiene la obligación de que sus actos individuales o colectivos no contribuyan a establecer fuentes permanentes de contaminación atmosférica”.
El texto además detalla que “el Estado se esforzará por liderar esfuerzos internacionales que, en base a evidencia científica, regulen las acciones de los seres humanos con efectos en la atmósfera, buscando mejorar la calidad de vida de los seres humanos y la salud de los ecosistemas”.
En esto, se plantea la creación de un estatuto especial que regule las obligaciones del Estado en la protección y restauración de las características naturales de la atmósfera, de modo de garantizar la existencia de condiciones que, a largo plazo, favorezcan la supervivencia de la vida en la Tierra, a la vez que permitan una continuidad de la valoración patrimonial y del quehacer científico relacionados con la observación de los cielos y del Espacio.
Convencional
La votación de la propuesta en la Comisión de Medio Ambiente fue transmitida por la convencional constituyente, Cristina Dorador, a través de sus redes sociales, plataforma donde la también académica de la UA, manifestó su satisfacción con el importante avance.
“Nos pone realmente muy felices (la aprobación del texto), porque esta es una norma que nace de la Región de Antofagasta. Desde las regiones construimos también la nueva Constitución”, afirmó la convencional del Distrito 3.
Dorador destacó especialmente que se trata de la primera propuesta aprobada en general por la Convención Constitucional en todo su periodo de funcionamiento y manifestó que con ella se aborda es un tema de mucho interés para la comunidad local, como es la contaminación del cielo.