Tras una extensa pretemporada en Lanús y armar a su pulso un equipo competitivo, José Miguel Cantillana volvió a no dar el ancho en la banca de Club Deportes Antofagasta mostrando un juego aberrante y resultados irritantes, lo que su salida se tradujo en una crónica de una “muerte” anunciada, la que incluso debió haber sido antes de dejarlo penúltimo en el Apertura.
Tras la dimisión del iquiqueño, los hinchas ya pedían al ídolo local Sergio Marchant de vuelta al mando técnico del equipo tras su aceptable paso tras el fiasco de Jaime Vera. En este sentido, el dueño de la Sociedad Anónima Jorge Sánchez echaba por suelo el anhelo de la fanaticada al señalar que el exvolante no tenía la experiencia necesaria y no se dedicaba a tiempo completo a la profesión de entrenador, por lo que su ascensión al cargo sería sólo de forma interina por el duelo con Huachipato, en donde se terminó perdiendo por la mínima diferencia a pesar de hacer una correcta actuación.
La gerencia técnica y el dueño del club iniciaron la ruta hacia el nuevo entrenador una vez que Cantillana se dio un auto ultimátum una fecha antes de renunciar, y allí surgen varios rostros para sucederlo: Héctor Tapia, el último campeón Dalcio Giovagnoli, e incluso el descendido Ivo Basay. Otros incautos hicieron caso a rumores de que podrían arribar los argentinos Reinaldo “Mostaza” Merlo o Claudio Borghi, sin embargo, quienes llevaban la delantera era el cuerpo técnico del último entrenador de la Selección Boliviana Mauricio Soria, a quienes clasificó a cuartos de final de Copa América tras 18 años, y el desconocido español Beñat San José, de experiencia en el profesionalismo sólo en pastos árabes. Por un lado, los bolivianos presentaron su proyecto, se mostraban muy interesados por llegar al fútbol chileno y tenían un avanzado conocimiento de los jugadores del plantel para preparar su arribo a la ciudad tan solo esperando el “sí” de la dirigencia.
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El elegido finalmente fue el desconocido vasco San José de 35 años y con una corta experiencia en las inferiores de la Real Sociedad (como Marchant), y de pasos por el Al-Ittihad, el equipo más popular del fútbol árabe y con quienes ganó la “King Cup of Champions”, algo así como la Copa Chile (Marchant cayó en semifinales), y el Ettifaq de la segunda división árabe. Si la experiencia era una variable importante en el discurso original de la dirigencia, entonces se terminaron pisando la cola, pues es el menos experimentado de todos los técnicos mencionados y proviene de una liga absolutamente menor y lejana a la nuestra. Al final quien demuestra su total inexperiencia, por esto y muchísimos otros factores, es Jorge Sánchez y su staff que aún no logran tomar bien el timón del gran buque que es llevar un club profesional y que hoy parece amateur.
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A San José le juega a su favor que por una parte es una gran apuesta por parte del dueño del club, que ha sido mal asesorado en todas las contrataciones previas de entrenadores, y que por donde se le mire Cantillana no le dejó la vara muy alta pues el CDA no gana desde abril por el Torneo Nacional, por lo que lo único que se espera es que le vaya bien por el bien de nuestros colores y sorprenda a los hinchas desconcertados por el arribo del español.
Y si de ibéricos se trata, no queda otra que recordar a otro vasco, Xabier Azkargorta, que alguna vez esperó que “una vez muerto el perro, se acabe la rabia”.
BENAT SAN JOSE from gaizka jimenez calvo on Vimeo.