La Cámara de Comercio de Antofagasta presentará una demanda colectiva de indemnización de perjuicios por el daño emergente y lucro cesante que provocó el corte del suministro que afectó al 60% de los clientes de la compañía Aguas Antofagasta en la ciudad. Desde el gremio advirtieron que las pérdidas no solo ocurren en aquellos locales que preparan alimentos, también apuntaron a todos los locatarios que interrumpieron sus negocios debido a la falta de agua, lamentando que esta crisis se registró durante la primera semana de un mes estratégico para el sector, época que les permite recuperarse después de un año complejo económicamente.
El presidente de la Cámara de Comercio de Antofagasta (CCA), Antonio Sánchez, sostuvo que como representantes de los locatarios están preparando lo que ellos han solicitado, realizar una demanda colectiva para tratar de resarcir en parte las pérdidas que trajo el corte del suministro. “Estamos en la primera semana de diciembre, cuando el comercio logra en algunas ocasiones revertir la mala situación económica vista durante del año y esta crisis nos toca justamente ahora. Esto es perjudicial y peor que si hubiese sucedido en otro momento del año”, señaló.
Desde la cámara expusieron que la ausencia de agua no solo afecta a los comerciantes que se dedican a la preparación de alimentos, ya que las obligaciones sanitarias indican que, si el local no posee baño no puede tener al personal trabajando, por lo tanto, si no cuenta con la posibilidad de almacenar agua, tampoco puede funcionar aun cuando no sea del rubro de la alimentación. “En este sentido, el sector gastronómico sufre doblemente, con locales que tienen productos perecibles y que debieron cerrar, eso implica más pérdidas”, puntualizó el dirigente.
Sánchez dijo que solicitaron a los comerciantes que se inscriban y que realicen evaluaciones sobre los daños económicos que sufren para luego actuar con sus abogados. Además, explicó que esto no se circunscribe solo a quienes son socios de la Cámara de Comercio, porque muchos no pertenecen a este grupo, pero ya se contactaron para adherirse a la acción judicial.
Lo que esperan de la demanda es que “en parte pueda resarcir el daño económico que presenta el comercio y que sirva como un aprendizaje para estar mejor preparados como ciudad ante este tipo de emergencias. Si esto hubiese sido algo superior, como el aluvión del 91 o el terremoto, por la forma como se abordó hoy, creo que habría sido mucho más complejo. En este momento la ciudad, tal vez por el desarrollo y otro tipo de preocupaciones, no se encontraba preparada o alguna autoridad no supo reaccionar en comparación a cómo nos tocó en otros momentos con situaciones incluso mayores”, comparó el dirigente.
Gestión de la emergencia
Siguiendo con esas declaraciones, el presidente de la CCA tuvo críticas para el manejo de la emergencia. Como ejemplo, señaló que les pareció de mal gusto que el lunes cuando comenzó el corte de agua, la primera reacción de la autoridad antes de ver cuáles eran los problemas generados y las ayudas que se necesitaban, fue fiscalizar y ordenar el cierre de locales comerciales que no tenían el agua. “Eso lo entendemos, cumplir con lo que la autoridad indica para realizar la labor, pero fue una señal negativa y después recibí comunicación que esto no había sido una orden emanada desde la máxima autoridad regional y esa primera reacción no nos pareció la más adecuada”, manifestó.
Sánchez indicó que, si analiza esta crisis en grados de magnitud de desastres, esto pudo ser algo menor, sin embargo, las reacciones y la forma de trabajar no han sido las mejores. Por ello, subrayó que esto tiene que servir de aprendizaje para cuando ocurra un incidente mayor.
“Quienes tenemos más años vivimos grandes emergencias en Antofagasta y por eso llama la atención que tuvimos eventos mucho mayores de lo que hoy ocurre y las reacciones en su oportunidad fueron más ágiles y efectivas. Llama la atención el grado de descoordinación, la incomunicación entre autoridades, porque hay alguna autoridad que pareciera tener más atención hacia lo comunicacional que hacia la efectividad respecto del trabajo mismo. Esto se nota y la ciudadanía termina siendo afectada, porque cuando una autoridad falla o no está a la altura de las necesidades, es la comunidad la que sufre”, cuestionó el dirigente.
