En la Comisión de Educación de la Cámara de Diputadas y Diputados intervino Karina Yoma, hermana gemela de Katherine, cuyo deceso ocurrido el 7 de marzo ha derivado en un paro docente que exige mayor protección para los trabajadores de la educación, impulsando la denominada «Ley Katherine Yoma».
«Katherine se quitó la vida el 7 de marzo, hasta el 6 hizo clases como la mejor profesora de inglés que conozco. Después de una agonía en vida, que llevó adelante la Corporación Municipal de Desarrollo Social de Antofagasta, que la preside nuestro alcalde que está ausente en esta comisión, Jonathan Velásquez Ramírez. El día de ayer tuvimos que interponer una querella en su contra por revelar documentos sensibles y él no la ha hecho fácil para nosotros, tampoco para Kathy», partió explicando a los parlamentarios.
Del mismo modo, Karina aclaró que «si estoy aquí, más que un aprovechamiento político como ha querido decir nuestro alcalde, no solo es por Kathy, por ese sueño que paradójicamente me quita a Kathy (el de ser profesoras), sino porque estoy representando a todas las personas que trabajamos en educación y que hemos perdido el rol de autoridad frente a lo que queremos hacer, que es educar y formar personas. Quiero que todas las personas que están aquí sepan que hoy está siendo muy difícil, no solo para los profesores, inspectores, asistentes de la educación y asistentes del aula, educar y formar. Eso pasa porque hay apoderados que piensan que nosotros queremos hacer todo mal o tenemos algo en contra de sus hijos. Estoy representando a todos quienes trabajamos en educación y espero que las discusiones de Ley Katherine Yoma, porque también confiamos en que eso va a ser realidad, puedan ser involucradas todas las personas que trabajamos en educación, no solamente profesores».
Señaló ante la comisión que todo estalló el 11 de septiembre, cuando ninguna entidad prestó apoyo a Katherine, situación que continuó hasta reducir sus horas pedagógicas a 16, con un sueldo de 293 mil pesos, sin que ella pudiera reclamar.
«Hablé con Kathy hasta el 7 de marzo, como lo hacíamos todos los días, y ella estaba angustiada porque también la mantuvieron en agonía de saber a qué escuela la iban a cambiar, porque no quería volver a la escuela donde había sido agredida, no solo por el apoderado, no solo por la estudiante, sino por el equipo directivo, psicosocial e incluso colegas, que no le creyeron a Kathy y le bajaron el perfil», continuó relatando.
«Sistema educativo no está funcionando»
«No esperemos que haya otra Katherine Yoma para revisar los protocolos, porque hay muchas áreas que convergen, desde lo laboral, lo pedagógico, la salud mental. Es totalmente indolente que una persona que quiere dialogar (y tenemos los respaldos de todo) se le diga que no porque tiene licencia médica», aseveró Karina.
A su juicio, «hay un sistema educativo que no está funcionando, un engranaje que no se está moviendo adecuadamente, y me atrevería a decir incluso que falta una pieza, una que a Kathy le faltó. Denunció en todas las instancias posibles, Corporación, Concejos Municipales. El alcalde sabía del caso. En la propia escuela, la Mutual, Superintendencia de Educación, Colegio de pProfesores. Ninguna entidad la ayudó. Siento que falta una pieza para que avance y no hayan más de este tipo de casos. Necesitamos urgente a todas las personas que trabajamos en educación, un resguardo, un apoyo para que podamos volver a tener dignidad en nuestro trabajo porque es importante. El rol que cumplimos es la profesión de las profesiones. Si no le damos la importancia a eso estamos desviados de lo que nos hará mejor como sociedad».