El alcalde de Mejillones, Marcelino Carvajal, manifestó que la propuesta de plan regulador entregada al Concejo Municipal y que contempla zonas que congelarán el desarrollo de las empresas que allí se encuentren, es un tema que necesita de un mayor análisis para mantener un equilibrio en la comuna. “Sabemos que la ciudad debe ordenarse, pero hay que tener mucha cautela”, manifestó el edil, considerando los eventuales impactos económicos que implicarían estas modificaciones.
El proyecto pasará a votación en el concejo en noviembre y al tratarse de un año electoral, resulta evidente que este debate se transformará en un tema de campaña. Algunos ediles ya explicitaron que apoyarán la propuesta que congelará el crecimiento de las industrias que estén en las áreas de amortiguación, mientras que el alcalde llama a cuidar el equilibrio entre desarrollo económico y ordenamiento de la ciudad.
La consultora a cargo del proyecto elaboró la alternativa integrada de la actualización del plan regulador. Entre los cambios que propone se encuentra la idea de establecer dos buffer de transición (áreas de amortiguación). El primero colindará con Mejillones y adquiere la denominación de zona productiva inofensiva, mientras que la segunda es aledaña al área de protección natural. “De aprobarse esta zonificación para la imagen objetivo, las empresas que se encuentren emplazadas en áreas que se considerarán de actividad inofensiva se congelará su posible crecimiento”, dice el documento presentado al concejo.
Carvajal sostuvo que se encuentra en la capital del país en medio de su tratamiento contra el cáncer y que por ello no participó en la exposición de la consultora. Aun así, el jefe comunal declaró que tiene conocimiento de que mucha gente quiere que el barrio industrial quede limitado, aunque todavía falta por ver la calificación ambiental de esa zona.
“Estoy de acuerdo que se tome un ordenamiento territorial, sin embargo, también me preocupa que se congele el desarrollo de Mejillones. Es un tema que necesita un mayor análisis, actualmente se está en un proceso de trabajo con las propuestas y algunas personas están en una posición más en la dura y me preocupa el desarrollo de la comuna”, dijo el alcalde.
También señaló que mucha gente quiere hablar de turismo en Mejillones y que si se hace bien todo resulta compatible. El problema, indicó, es que también hay deseos de proyectar un barrio en otro sector. Además, recordó que sin la llegad de las industrias, hoy la ciudad estaría muy complicada, ya que se trata de la actividad que sustenta la comuna.
“Si viviéramos del pasado, del fertilizante, del ferrocarril, la guaneras, la pesquería, no existiría nada. Sabemos que la ciudad debe ordenarse, pero hay que tener mucha cautela, hablamos de hidrógeno verde, descarbonización, tecnologías limpias y pareciera que nadie le interesa renovar, simplemente que no tengamos nada. Tenemos que hacerlo equilibrado, no podemos matar el desarrollo de una ciudad que gracias a la actividad industrial portuaria está viviendo”, señaló.
Sobre los proyectos de hidrógeno verde que están en camino para Mejillones, Carvajal expuso que es la tecnología del futuro que moverá el mundo. “Si la gente no se informa bien y tal vez no lo quiere en el barrio industrial, mañana estará en medio de la ciudad como los servicentro. Es el combustible del futuro y cuando hablamos de hidrógeno, nosotros desde el año 80 tenemos a Enaex, que tiene hidrógeno, aunque no es verde”, advirtió.
Ante todas estas dudas, el alcalde enfatizó que el plan regulador tiene que ser bien consensuado, algo que no resulta sencillo, porque “si nos vamos a lo romántico, paramos el desarrollo de la ciudad. Y si nos vamos al crecimiento y desarrollo con equidad, logramos el objetivo”.
Sobre esta discusión que llega en año electoral, el edil concluyó que hay quienes no quieren nada para Mejillones debido a que las empresas no dan trabajo suficiente. “Hay que consensuar bien, porque después la gente va a golpear la puerta a los municipios cuando tienen necesidad de empleo”, apuntó Carvajal.
