Un grupo criminal con alto nivel de organización tenía su centro de operaciones en el campamento “Génesis II” de Antofagasta. La banda no solo manifestaba su control del asentamiento a través del tráfico de drogas, la extorsión de sus vecinos y el arriendo viviendas, los delincuentes incluso establecieron un cobro mensual por el acceso a los servicios de electricidad y agua potable. En la audiencia de formalización que dejó a los involucrados en prisión preventiva, el fiscal regional Juan Castro Bekios relató que también ejecutaron el secuestro y tortura de dos personas, lo cual fue registrado y publicado en redes sociales para atemorizar a los residentes de la toma.
La investigación además expuso la existencia de una casa de torturas conocida como “el picadero”, que era utilizada por la organización compuesta por diez colombianos, junto a otros sujetos que aún no son detenidos. Según la fiscalía, operaban en “Génesis II” al menos desde el segundo semestre de 2019 y el Ministerio Público le atribuyó participación en al menos dos delitos de homicidio consumado, cuatro homicidios frustrados, dos secuestros, tráfico de drogas, porte de armas y municiones, lesiones graves y amenazas.
“Si no se asume un trabajo serio y responsable, con el objetivo de prevención, seguirá incrementándose la presencia de bandas organizadas y a pesar de que se detengan a algunas personas, otros llegarán a ocupar esos espacios”, advirtió el coronel (r) Rodrigo Alegría, exprefecto de Carabineros de Antofagasta y analista criminal para la gestión de la seguridad.
10 días después del operativo que terminó con diez colombianos detenidos, el Ministerio Público desarticuló otra banda de crimen organizado, esta vez, compuesta por venezolanos que tenían operaciones en el campamento “Cerro Bonito” de Antofagasta. Vinculados al Tren de Aragua, los ocho integrantes quedaron en prisión preventiva tras ser formalizados por dos delitos de secuestro con homicidio, un homicidio consumado, un homicidio frustrado, porte ilegal de municiones, tenencia ilegal de material bélico, tenencia ilegal de explosivos, tráfico de drogas, amenazas y asociación criminal.
Quiénes son
El coronel (r) indicó que es evidente que la ciudad tuvo un crecimiento explosivo de campamentos y que ante una presencia amplia de residentes resulta complejo conocer quiénes están viviendo allí. “Hace un par de meses me tocó revisar información de todos los rucos que hay desde la rotonda Pedro Aguirre Cerda hasta Coloso y el 78% de las personas que viven en esos lugares son chilenos. Entonces nos preguntamos dónde están los extranjeros sin carné de identidad y estarían radicados en los sectores de campamentos, lo que es un poco más complicado porque no sabemos cuál es la cantidad ni quiénes son”, señaló Alegría.
En ese escenario, la primera medida para el oficial en retiro es aplicar un mejor control en las fronteras para determinar quiénes están ingresando al país. Pero una vez que estas personas están asentadas en los campamentos, tiene que desarrollarse un trabajo multidisciplinario, dijo. Y en este sentido recalcó que no solamente tienen que entrar las policías y la fiscalía, se necesita a otro actor importante que es el Estado a través de sus servicios públicos, por ejemplo, procediendo con desalojos puntuales en los lugares más complicados.
“Ya vemos la realidad que hay en Santiago, que luego de encontrar fallecido al oficial venezolano, recién ahí se implementaron medidas para desalojar. No tenemos que esperar a que muera un fiscal o un ministro para actuar. La situación está aumentando y se requiere un trabajo multidisciplinario que reúna al Gobierno Regional, el municipio y los servicios públicos. Otro punto muy importante es Gendarmería, porque tiene información de las bandas que operan en las cárceles, datos que muchas veces no se comparten de forma fluida con el resto de las policías”, puntualizó el coronel (r).
Ese trabajo multidisciplinario tiene que establecer la realidad de cada uno de los campamentos, intervención que permitirá controlar lo que está sucediendo en esos sectores de los cuales, muchos no cuentan con calles de acceso para vehículos y presentan zonas que escapan a toda fiscalización posible.
Actores ausentes
“Hay actores que están ausentes en el trabajo de prevención, lo digo responsablemente. Los únicos que ingresan con bastante frecuencia a los campamentos son los MICC (Modelo de Integración Carabineros-Comunidad). Incluso lo hacen caminando, porque no existen calles que permitan el desplazamiento de los vehículos policiales. El MICC reúne información importante, como la cifra de niños, lo que sirve para la prevención policial. Sin embargo, se trata de un solo estamento y sería fundamental que Dideco realizará un trabajo en estos sitios, falta mucha coordinación”, lamentó el analista criminal.
Los servicios públicos tienen que aportar desde su plataforma para tareas de prevención a largo plazo, para que esta realidad no se transforme solamente una cuestión policial, labor que ya realiza Carabineros y la PDI en conjunto con la fiscalía, advirtió.
“Si no se asume un trabajo serio y responsable, con el objetivo de prevención, seguirá incrementándose la presencia de bandas organizadas y a pesar de que se detengan a algunas personas, otros llegarán a ocupar esos espacios. El crimen es multifactorial y si no lo enfrentamos de la misma manera, seguiremos viendo casos de bandas organizadas. Entiendo que Prevención del Delito en la región lo conforman dos personas, qué pueden hacer en cuanto a prevención”, declaró el exprefecto de Antofagasta.
Para Alegría, la ciudad todavía está a tiempo de realizar estas intervenciones, sin embargo, cree que ese tiempo está en “los descuentos”, agregando que deberíamos estar ocupados en esta situación y desarrollando estrategias que vayan en pos de la prevención.
“No solamente quedarnos con las mesas de seguridad, sino que ejecutar cuestiones concretas, como aumentar la luminosidad en las tardes para evitar los sectores oscuros. Para solucionar los espacios donde se encuentran los campamentos se debe imponer una mirada con un diseño urbano adecuado, lo que tiene que ser desarrollado por profesionales formados en arquitectura urbanística”, aseguró Rodrigo Alegría.
Excelente exposición de la realidad verdadera expresada por el señor Rodrigo Alegría
Por fin !!!!
Ojalá no quede sólo en palabras .