La antofagastina María Jesús Ponce (29) viajará en los próximos días a Estados Unidos para exponer una colección de 12 estilos en la New York Fashion Week 2021, el desfile de moda más importante del mundo. La diseñadora de vestuario explicó que se trata de una oportunidad única para exponer su último trabajo titulado como “Brvno”, nombre que se debe a su hijo de cuatro años a quien no ha podido ver desde el inicio de la pandemia. En los últimos preparativos antes de su participación, Ponce recordó cómo pudo entrar en el mundo de las pasarelas en el 2015, cuando se apuntó como voluntaria para limpiar vidrios y pisos en un evento en el que, al año siguiente, terminó estrenando su propia marca de ropa.
La joven explicó que para ser parte de esta fashion week primero hay que postular. Seis meses antes se prepara la colección y envía la solicitud. “En una conversación con dos amigos del mundo de la moda me preguntaron en qué estaba y qué quería hacer. Mi idea era relanzar mi marca SaintJesus, pero no me atrevía por todos los problemas que había pasado. Estaba esperando una oportunidad, que pasara algo que me indicara que debía hacerlo. Dos días después me preguntaron si postularía a la New York Fashion Week si me consiguieran un cupo y dije que sí. Envié los diseños y en nada, dos meses antes del evento conseguí el cupo”, dijo.
En el desfile presentará 12 looks (estilos) y la organización colocará las modelos dentro. Y señaló que se trata de una instancia única para exponer su marca, porque a la pasarela asistirán famosos junto a importantes compradores y “voy a ser la única chilena”. En este proceso trabaja con una costurera fabricando algunos trajes y otras cosas son derivadas a taller.
Ponce expuso que llegar a esta instancia es muy difícil, el proceso incluye la postulación y la aprobación de su colección. “Estar en la New York Fashion Week es como llegar a lo inalcanzable, es el desfile más exclusivo y selecciona mucho lo que quiere mostrar. Que eligieran mi colección fue genial ya que hablamos de la semana de la moda donde se presentan grandes marcas, también coincide con el US Open y esto marca la reapertura de todo”, detalló.
La joven este fin de semana viaja a los Estados Unidos y en caso de recibir alguna propuesta, esta vez no tiene dudas en quedarse para aceptarla. Esto, debido a que tuvo varios ofrecimientos anteriores, como una propuesta para ser diseñadora de una compañía, pero en ese momento estaba casada y era complejo mover a su familia a Canadá.
“Para mí esto es muy importante porque significa relanzar mi marca, ya que tuve muchos problemas para registrarla. El nombre de mi colección es ‘BRVNO’, que es el nombre de mi hijo que vive en Brasil, con quien no he podido estar en todo este tiempo de pandemia. Toda la ropa ha sido aprobada por él, es un trabajo en conjunto, ideas de Bruno y mías”, relató.
Su camino en el diseño
Hija de una kinesióloga y un ingeniero comercial, la joven nació en Antofagasta y manifestó que el diseño de vestuario siempre fue una actividad de su agrado, por ello siempre veía ilustraciones de moda y tenía deseos de convertirse en diseñadora. “Nadie imaginaba esto, todos decían que me iba a morir de hambre, pero sabía que esto era lo mío. Siempre fui la niña que se vestía raro, me gustaba vestirme distinto y también me sirvió viajar y tener la influencia de amigos de mis padres que eran extranjeros, para conocer cómo se viste la gente en otros países”, dijo.
Estuvo hasta los 16 años en la región, fue alumna en el British School y luego continuó sus estudios en Santiago, aunque sus padres se quedaron en esta zona. Como tenía claridad en lo que deseaba realizar, estudió diseño de vestuario en la Universidad del Pacífico.
“Mis primeras ideas las saqué en la universidad, donde al principio me iba pésimo. No tenía buenas notas y cuando presenté mi tesis la nota fue un dos. El proyecto era crear carteras finas con tejido de Doñihue, pero me dijeron que no era viable, que era muy caro y prácticamente querían que yo aprendiera esa técnica. De todas formas, terminé la tesis y me saqué un siete”, sostuvo Ponce.
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El 2015 se tituló y ese mismo año viajó hasta Canadá con la meta de estudiar inglés. No tenía ningún trabajo hasta ese momento, sin embargo, tuvo la oportunidad de entrar como voluntaria limpiando vidrios y trapeando pisos en el Fashion Week de Vancouver. “Como trabajé harto escalé y me ascendieron a escribir los nombres de los diseñadores, esa era mi tarea, después fui asistente de diseñador que era lo máximo y eso me dio la oportunidad de mostrar mis ideas. Mis trabajos llegaron a manos del dueño del desfile en Vancouver, eran los trabajos de la universidad, la ropa e ilustraciones de moda, ni siquiera los tenía ejecutados, se trataba de diseños que tenía como colecciones, y él dijo ‘esta chica tiene talento y voy a auspiciarla’. Y el año siguiente lancé mi marca en ese mismo evento”, contó.
El 2016 presentó las creaciones de su marca “SaintJesus”, para más tarde participar luego en las fashión week de Tokyo (Japón) y Santiago (Chile). Tras estas presentaciones se estableció en Brasil y congeló el trabajo de su marca, pero el 2019 retornó a Chile y se propuso relanzarla gracias a que pudo concretar su registro.
“Colocar la marca fue difícil, al principio me fue muy bien, pero tuve problemas porque no la tenía registrada. Estaba creciendo, pero el registro no estaba listo porque otra marca se oponía debido a una similitud que solo es fonética, ni siquiera son parecidas. Esto fue un problema completo, seguía creciendo y en paralelo aparecieron otras marcas parecidas a la mía. A principios de este año recién pude lograr el registro, cambiando de abogado para ello y dije que tenía que lanzar sí o sí mi marca. Como me casé estuve viviendo en Brasil, después me divorcié, regresé a Chile y ahora voy a relanzar aprovechando que se presentó la oportunidad en el New York”, expuso la diseñadora.
Para iniciar este camino, añadió, lo que más le sirvió fue ser siempre realista, pero nunca conformarse. Buscó dónde podía estudiar lo que le gustaba, averiguó sobre cursos para entrar al mundo de la moda, “que es muy cerrado y te miran como una pueblerina que no llegará lejos. Otra cosa fue irme del país, porque en Chile no podía surgir mucho y por lo menos a mí, las oportunidades se me abrieron todas afuera”.
[…] La Diseñadora de vestuario de 29 años partió limpiando vidrios y pisos en un desfile en Canadá, instancia que le dio la posibilidad de mostrar su trabajo y lanzar su propia marca. “Que eligieran mi colección fue genial, ya que hablamos de la semana de la moda donde se presentan las grandes marcas, también coincide con el US Open y esto marca la reapertura de todo”, dijo María Jesús Ponce, sobre lo que será su experiencia en Estados Unidos. […]