Un total de 45 trámites de desratización predemolición ingresaron desde enero a diciembre del presente año a la Seremi de Salud de Antofagasta, lo que representa un 42% menos con relación al 2023. No obstante, la cifra mantiene la tendencia general de los últimos 4 años, período en que el número de requerimientos se mantuvo entre los 44 y 51.
En conformidad a los datos de la repartición gubernamental, el 2023 ingresaron 67 tramitaciones, mientras que el 2022 y 2021, 51 y 44 respectivamente.
La seremi de Salud (S), Leonor Castillo, explicó que este trámite permite obtener un pronunciamiento de la Autoridad Sanitaria, donde certifica o rechaza la eficacia del tratamiento de desratización llevado a efecto por una Empresa Aplicadora de Pesticidas de Uso Doméstico (EAPUD) en una propiedad previo a su demolición, según lo que establece el artículo 103 del D.S. 157/2007 “Reglamento de Pesticidas de Uso Sanitario y Doméstico”.
La autoridad recordó que esa norma establece claramente que la demolición de construcciones no podrá ser realizada sin contar con certificado de desratización emitido por la empresa aplicadora y visado por la Autoridad sanitaria correspondiente.
“Como Autoridad Sanitaria debemos fiscalizar los tratamientos realizados verificando su efectividad y emitiendo un certificado aprobando o rechazándola”, dijo Leonor Castillo.
Peligros
La seremi (s) advirtió los peligros para la salud pública que implica emprender una demolición sin una desratización previa. “Un inmueble, sobre todo si está abandonado hace tiempo, puede ser refugio de plagas como ratones. Si se emprende una demolición sin este proceso previo, existe el riesgo real que esos vectores de enfermedades se trasladen masivamente a las viviendas aledañas”, dijo.
Norma ISO 9001: 2015
Cabe consignar que este trámite de autorización ante la Seremi de Salud se rige por la norma de calidad ISO 9001: 2015, lo que significa que el proceso es sometido a auditoría periódica para asegurar su óptima implementación.
La personera recordó que la normativa establece que la demolición no podrá iniciarse antes de 21 días del inicio de la desratización, con el objeto de evitar los efectos de los productos en el personal que laborará y asegurarse del exterminio de la plaga.
Finalmente subrayó que los particulares y las empresas que estén efectuando demoliciones sin autotización sanitaria, arriesgan sanciones que pueden fluctuar entre un décimo y las mil UTM, de acuerdo al Código Sanitario.
