El peritaje de una profesional del Servicio Médico Legal (SML) de Antofagasta es parte de la cadena de errores en torno al caso de Tomás Bravo, menor de tres años y siete meses que fue encontrado muerto luego de nueve días de búsqueda en una aldea de la región del Biobío, en febrero de 2021.
Así lo revelan los informes del Ministerio Público, difundidos en medios nacionales, donde la fiscal Marcela Cartagena cuestiona que los estudios histopatológicos fueran enviados a Zenaida Beltrán, en nuestra capital regional.
Aquello debido a que Concepción no cuenta con un anatomopatólogo. Y Antofagasta tampoco, pues de acuerdo a la persecutora, la profesional a honorarios del SML tiene “falta de especialización y una experiencia evidentemente reducida para un caso de tanta connotación como el presente”.
“Las consecuencias de aquella decisión han quedado de manifiesto en el Informe Histopatológico presentado por la mencionada doctora Beltrán, el cual adolece de gruesos errores”, señala el texto publicado en La Tercera.
Ahora, en Informe Especial de 24 Horas se conoció que Zenaida Beltrán estableció que “los rasguños en el cuerpo del niño se producen en vida, confunde procesos como la necrosis con la momificación del cuerpo y atribuye lo que observa en una muestra de pulmón con un enfisema, enfermedad crónica que el niño no tiene”.
“Creo que el servicio está funcionando en forma anómala, tiene algunos profesionales destacados de calidad, pero las personas que intervinieron en este proceso al menos son personas que no debieran estar en el servicio público a cargo de revisar este tipo de procedimientos”, dice el abogado de Moisés Bravo, padre del pequeño.
Por lo anterior, el Ministerio Público plantea la necesidad de un segundo informe histopatológico para evitar que los errores mencionados formen parte de las conclusiones de la autopsia.
Consignar que en la investigación hay otras “situaciones irregulares” por parte de la Policía de Investigaciones, como “acciones, omisiones y posibles negligencias”. Entre dichos errores cabe destacar que no se dispuso vigilancia para el tío del menor, Jorge Escobar, así como tampoco se tomaron muestras relacionadas a un posible delito de violación.
Revisa el capítulo de Informe Especial pinchando aquí.