El Consejo Constitucional no aprendió de los errores de la Convención y fue hacia los maximalismos, cuyo resultado probablemente no termine por representar a toda la ciudadanía, advirtió el senador Pedro Araya (IND-PPD). Considerando las normas que le preocupan, como las relacionadas con las AFP e isapres, el parlamentario explicó que votaría en contra de la propuesta, sin embargo, no fijará una postura para el plebiscito hasta que el documento sea revisado por los expertos.
“Más que hablar de un color ideológico diría que el texto que estamos conociendo más bien no representa una Constitución que sea la casa común para la ciudadanía. Por eso insisto en que se está cometiendo el mismo error del proceso pasado, cuando se trató maximizar temas que no hicieron sentido a la comunidad”, declaró Araya, destacando que la actual Carta Fundamental sufrió una serie de modificaciones de consenso en una época democrática con el Presidente Lagos.
El senador puntualizó que los partidos de la centro izquierda ya han sostenido conversaciones por los comicios del próximo año. Y en ese sentido, espera que pronto se resuelva el mecanismo para contar con candidatos únicos y evitar que exista una instancia que genere descolgados compitiendo por fuera. El gobernador Ricardo Díaz ya adelantó que se presentará a la reelección y el parlamentario señaló que no “veo ningún problema en que Ricardo sea el candidato de la centro izquierda, pero insistimos, si es él, tiene que ser en un proceso acordado para que no signifique un trauma posterior respecto de que quede algún partido pensando que no fue escuchado y termine restándose de la campaña de Ricardo”.
- ¿Qué evaluación tiene del trabajo del Consejo Constitucional hasta el momento?
El Consejo Constitucional está cometiendo los mismos errores que tuvo la convención en su minuto, tratando de llegar a un maximalismo, tratando de armar una Constitución que probablemente no va a representar a todos los chilenos y chilenas. Es lamentable que no se aprendiera nada del proceso anterior.
- De los aspectos que se conocen, ¿cuáles son los que más le preocupan?
Sin conocer todavía el texto completo y entendiendo que falta una parte, que es la revisión que harán los expertos, hay varios temas que en lo personal me preocupan. Por ejemplo, cómo se está consagrando lo que es el derecho de propiedad, lo relacionado con el tema de las AFP e isapres que, en la práctica de aprobarse algunas de esas normas, será imposible modificar el sistema previsional. También me preocupan algunas normas respecto de que las personas que alcancen cierta edad no puedan cumplir penas de cárcel.
Y otro tema que si bien es cierto es muy popular, a lo menos requeriría alguna explicación de los consejeros y es eximir el pago de las contribuciones. Cualquier persona que haga políticas públicas en forma seria sabe que al eliminar ese impuesto habrá que reponerlo por otra vía, ya que una de las principales fuentes de financiamiento de los municipios son las contribuciones. Con independencia del criterio que uno pueda tener sobre lo que haga o deje de hacer un alcalde, al final del día representan el grueso del financiamiento de los municipios.
- ¿Lo que observa es una propuesta de Constitución cargada a la derecha o no podría hablar de un color ideológico?
Más que hablar de un color ideológico diría que el texto que estamos conociendo más bien no representa una Constitución que sea la casa común para la ciudadanía. Por eso insisto en que se está cometiendo el mismo error del proceso pasado, cuando se trató maximizar temas que no hicieron sentido a la comunidad.
- ¿A favor o en contra?
Todavía hay un filtro que tiene que ver con la opinión de los expertos. Estamos a la espera de conocer el texto final antes de tener una decisión, porque probablemente como está hoy la propuesta la votaría en contra, pero, esto puede ser corregido en el último trámite.
- En el anterior proceso se decía que cualquier Constitución sería mejor que una redactada en dictadura.
Hay que desmitificar. Es cierto que la Constitución nació en la dictadura con Pinochet, pero si uno mira lo que ha pasado en el tiempo, la actual Constitución que nos rige tuvo un amplio consenso en democracia y que se aprueba el año 2005, cuando el Presidente Lagos impulsó un paquete de medidas que reformó buena parte del sistema constitucional chileno. En ese minuto hubo tres grandes temas que no pudieron ser modificados. El primero fue el sistema electoral, que logró cambiarse en el segundo gobierno de la Presidenta Bachelet en el 2015. El segundo fueron los quórums supraconstitucionales, ley desde el año 2022 con proyecto que presenté con la senadora Rincón y el senador Walker para bajar los quórum. Gracias a esa iniciativa puede realizarse cualquier reforma a la Constitución y una cosa distinta son las mayorías del Congreso, algo que depende de la voluntad de la ciudadanía. Y el tercer punto fue el Tribunal Constitucional que, si bien registra algunas modificaciones menores, no ataca el problema de fondo que tiene que ver con sus funciones. Se trata del único candado que queda de la vieja Constitución del 80. Ahora, si miramos la cantidad de cambios, sobre todo en el artículo 19, que consagra los derechos constitucionales, han sido numerosos y todos hechos desde el consenso.
- En caso de que la propuesta sea votada en contra, ¿qué camino debería continuar el país?
Tenemos que esperar que termine este proceso antes de empezar a pensar ciertos escenarios. Hay que recordar que en el Congreso existió la precaución de establecer que una vez que terminen su trabajo los consejeros, la Comisión de Expertos revisará y a partir de eso habrá un nuevo debate. Si llegara a tener un nuevo rechazo, mi apreciación, es que probablemente debería optarse por otra vía, por ejemplo, que el Congreso discuta el proyecto constitucional que presentó en su minuto la Presidenta Bachelet. Y teniendo como insumo el trabajo de la Convención y del Consejo, texto que se plebiscitaría a la ciudadanía. La otra opción es derechamente buscar un tercer proceso constitucional, pero mi impresión es que ya hay demasiado desgaste en la comunidad.
Agenda de seguridad
- ¿Cuánto ha avanzado la agenda de seguridad en el Congreso?
Está avanzando bastante, con temas que han salido estas semanas y que permiten tipificar nuevos delitos y entregar mayores atribuciones a las policías, aunque hay otros de mayor complejidad y que han demorado un poco más su tramitación. Es una agenda que avanza y el Congreso ha puesto un interés especial en ella, para ir generando consensos tanto con el gobierno como con los operadores del sistema de persecución penal sobre cuáles son las medidas concretas que realmente ayudan, por ejemplo, a desbaratar bandas criminales.
- ¿Qué herramientas legislativas pueden entregar o están faltando para combatir a un crimen organizado que ya opera en el país?
Una de las grandes modificaciones que está pendiente, algo que hemos dicho en reiteradas ocasiones, es la necesidad de realizar una reforma estructural al sistema procesal penal. Necesitamos una reforma procesal penal 2.0, porque el sistema que se ideó, a mi juicio, no responde a los requerimientos actuales de la persecución penal. En este sentido, tenemos que señalar que el gobierno de recogió el guante de esto y existe un proyecto que está discutiéndose en el Senado que permitirá un cambio sustancial en el trabajo del Ministerio Público al permitir la creación de una fiscalía supraterritorial. A partir de eso tenemos que seguir avanzando, por ejemplo, en una modificación de lo que es la orgánica del Ministerio Público, la orgánica de los tribunales de Garantía y Oral en lo Penal. Y un tercer punto que no se puede quedar atrás es una modernización de las policías y Gendarmería.
Región
- El próximo año la región comenzará a recibir los recursos del royalty, llegarán los dineros del litio y avanza la descentralización. ¿Se acabaron las excusas para que Antofagasta no alcance el desarrollo esperado, a quién debe exigirse aquello?
Aunque esto ha sido desde siempre, pero con especial énfasis desde el próximo año, toda la comunidad tendrá una gran responsabilidad y es fiscalizar qué harán los municipios y el Gobierno Regional y los consejeros regionales. Probablemente, a partir del próximo año no podrá seguir la excusa de que en Antofagasta falta plata para tal o cual proyecto, ya que tendremos una cantidad importante de recursos. Esto hay que decirlo porque los presupuestos que tienen los municipios y los gobiernos regionales no se van a tocar, son recursos adicionales. Entonces, probablemente el problema que habrá en la región no será de recursos, sino de capacidad para ejecutar y gastar bien esos dineros y realizar las obras que demandan las comunas de la región.
- ¿Cuáles son las mejores cartas que tiene su sector para las elecciones de la Gobernación Regional y las alcaldías?
Todavía falta un largo tiempo para para la elección, aunque pareciera corto porque estamos casi a final de año. El tema de quiénes serán las cartas a las alcaldías, los concejos y la gobernación, más que señalar a qué partido pertenecerán, tiene que ver, a mi juicio, con qué proyecto de ciudad son capaces de levantar los candidatos. Lo que hemos conversado al interior de la centro izquierda es la necesidad de tener un candidato único a alcalde y gobernador, ésa es una línea base que necesitamos para tener candidaturas competitivas. Lo segundo es generar un proyecto común respecto de qué ofrecer a la ciudadanía, porque hoy no basta con decir que levantaremos un nombre para todos trabajar detrás de él. Se necesita un proyecto de ciudad, de región y a partir de eso ser capaces de generar la fuerzas necesarias para los candidatos.
- ¿Esas candidaturas únicas deberían definirse a través de primaria o acuerdos?
La ley da posibilidad de que esto pueda ser a través de primarias y lo que planteé en una conversación que tuvimos la semana pasada con los expertos electorales de los distintos partidos, es que debemos tratar de que el proceso de designación de candidatos sea lo menos traumático posible. Esto, para generar después las alianzas necesarias y enfrentar las elecciones. La primaria no es descartable.
- ¿Su sector respaldará al gobernador Ricardo Díaz que buscará la reelección?
No veo inconveniente en que nuestro sector respalde a Ricardo Díaz como candidato a gobernador. Pero tenemos que tratar de que si Ricardo Díaz es el candidato de la centro izquierda, tiene que ser con un consenso importante, para evitar la fuga de otros posibles candidatos que dificulten su reelección. Más que comenzar a señalar a un candidato, queremos que se defina rápido un mecanismo para resolver los candidatos de los partidos, si será por acuerdos, primarias o encuestas. Queremos que esto pueda saberse rápido para que quienes tienen aspiraciones a competir tengan las reglas del juegos claras desde ya y a partir de eso generar espacios de acuerdo que nos permitan designar a las mejores personas. Y en ese sentido, no veo ningún problema en que Ricardo sea el candidato de la centro izquierda, pero insistimos, si es él, tiene que ser en un proceso acordado para que no signifique un trauma posterior respecto de que quede algún partido pensando que no fue escuchado y termine restándose de la campaña de Ricardo.
- ¿Eso se definiría en diciembre después del plebiscito constitucional?
Para nadie es un misterio que el tema constitucional y probablemente el resultado de la consulta constitucional pueda cruzar las aspiraciones que tengan determinados bloques. En lo personal y en esto también hay otros senadores que estamos en la misma línea, es que este proceso debiera decidirse ojalá de aquí a diciembre.