Las regiones del norte de Chile son el punto de ingreso diario de cientos de venezolanos que escapan de la crisis económica de su país. Este flujo migratorio abre el debate sobre el trabajo de las diferentes autoridades, más aún, luego de los episodios de violencia ocurridos durante el fin de semana en Iquique. Antofagasta es una ciudad de paso para este grupo, explicó el delegado presidencial, Daniel Agusto, quien manifestó que, en este escenario, lo que buscan es la circulación y que “cada una de las personas pueda llegar a su destino que está en el sur”, descartando la posibilidad de habilitar albergues. Sin embargo, el gobernador regional Ricardo Díaz y el senador Pedro Araya, emplazan al Ministerio del Interior a que tome medidas para enfrentar lo que está sucediendo en Antofagasta y Tarapacá.
El terminal de buses de la ciudad es el principal punto de aglomeración de venezolanos en la comuna. Ahí quedan detenidos hasta conocer el resultado de su examen PCR y a la espera de conseguir un pasaje para dirigirse hacia la Región Metropolitana. Y es precisamente esto lo que recuerda el delegado presidencial, que, en el caso de Antofagasta, los venezolanos solo están de paso. “Tenemos un plan que lo estamos ejecutamos hace varias semanas. Partimos descomprimiendo la situación que se estaba generando en el terminal de buses y junto con eso habilitamos el gimnasio polideportivo, lo cual fue exitoso porque logramos descomprimir y tener a la PDI en un proceso de control migratorio 24/7 y también a la Seremi de Salud”, explicó.
Agusto manifestó que el flujo migratorio es difícil de controlar, debido a los 700 kilómetros de frontera y los pasos no habilitados, factores que dificultan una cobertura de toda esa franja. “Pero una vez que los migrantes están en Chile hay que ver la fórmula de que su estancia sea digna”, subrayó. Descarta que en el corto plazo ocurra algo similar a lo visto en Tarapacá, porque están buscando la forma de descomprimir esas aglomeraciones. “Lo que pasó en Iquique fue que las personas se quedaron en un lugar, pernoctando en condiciones complejas. Lo que nosotros queremos es un tránsito y que las personas sigan su destino porque llegan a Antofagasta buscando transporte para dirigirse al sur”, aseguró.
En ese sentido, dijo que no han analizado la posibilidad de instalar un albergue y no cree que esa sea la solución para Antofagasta. El delegado detalló que han generado contacto con empresas de transporte para que puedan salir del gimnasio polideportivo, directamente hacia los lugares de destino. “Hemos observado la situación, esperamos que no aumente, pero en esas circunstancias, seguiremos buscando todas las alternativas (…) Recordemos que la mayoría de ellos no pretende quedarse en Antofagasta, por lo tanto, hasta el momento no hemos sido precursores de un albergue. Al contrario, lo que buscamos es que exista una circulación y que cada una de las personas pueda llegar a su destino que está en el sur”, insistió.
Aduana sanitaria
El representante del Ministerio del Interior en la región sostuvo que intentan trabajar con todos porque prácticamente “somos los únicos que estamos accionando en este tema”, haciendo un llamado al resto de las autoridades a sumarse con “planes concretos, con iniciativas, con propuestas, para que trabajemos de manera en una temática que es compleja”.
Agusto adelantó que la próxima semana instalarán una aduana sanitaria y controles que realizarán en el sector norte de Tocopilla. En caso de que sea necesario, barajan una idea, que debe ser revisada por el Ministerio de Salud, para ver la factibilidad de vacunar a los inmigrantes para proteger a la región y en el caso de quienes resulten positivos por el virus, realicen sus carentenas en las residencias sanitarias.
El gobierno central tiene facultades
El gobernador regional Ricardo Díaz declaró ayer que la situación migratoria en el norte grande “es catastrófica y por lo mismo lo que necesitamos son medidas que nazcan desde el Ministerio del Interior”. Desde la Asociación de Gobernadores Regionales plantearon que es necesario un control migratorio, establecer albergues, ejecutar exámenes de PCR y desarrollar una trazabilidad para la población migrante, junto con disponer de un transporte seguro.
“Además, abordar el aspecto humanitario, en los albergues hay que ofrecer comida alimento y abrigo, ésa es la manera de administrar bien la migración. Si se controla a través de pasos habilitados, si se hace adecuadamente, respetando los tratados internacionales, es posible lograr un control y generar un puente seguro donde la migración pueda avanzar. Eso no puede detenerse y las declaraciones que ha realizado Interior, y en especial el subsecretario Galli, son declaraciones que rechazamos en absoluto. Los gobernadores no tienen las facultades para iniciar estos procesos, pero sí las tiene el gobierno central”, cuestionó Díaz.
Modificar Plan Frontera Protegida
El senador Pedro Araya (IND-PPD) llamó al gobierno a modificar el Plan Frontera Protegida para que no solo involucre a quienes ingresan por los aeropuertos, también para todos los migrantes que están ingresando diariamente al país por pasos no habilitados. “El drama humanitario que se genera con la migración se está transformando en un problema sanitario y de seguridad pública para muchas ciudades del norte de nuestro país”, apuntó.
El parlamentario coincide con el gobernador regional en que es el Ministerio del Interior el que debe actuar para enfrentar esta compleja situación. Araya aseguró que meses atrás advirtió a las autoridades a diferentes autoridades en Santiago, y en particular al Ministerio del Interior, sobre lo que podría ocurrir en el norte. “Pareciera que este gobierno es sordo, pareciera que si los hechos no ocurren en Santiago no existen, yo le hago un llamado al Ejecutivo a dejar la planilla Excel y hacer más terreno, a visitar las localidades que hoy viven esta situación, que visiten Iquique, Calama, Tocopilla o el terminal de buses de Antofagasta”, emplazó el senador.