Con 20 años de una exitosa carrera y presentaciones a nivel mundial, vuelve a Antofagasta la banda homenaje a Queen, “Dios Salve a la Reina». La agrupación es considerada como el tributo oficial más importante del mundo, recorriendo más de 40 países con un nuevo espectáculo de estreno en la ciudad nortina.
“Dios Salve a la Reina”, está compuesta por los argentinos Pablo Padín, Ezequiel Tibaldo, Dani Marcos y Matías Albornoz, quienes vuelven a la vida la exitosa banda británica y mantienen su música vigente en la actualidad. El parecido de Padín con Freddy Mercury, quien es el vocalista del grupo, impresiona, no solo por el aspecto físico, sino también por los movimientos, baile, voz y postura.
La banda presentará clásicos como “I Want To Break Free” y “Bohemian Rapsody” en Antofagasta el próximo sábado 18 de noviembre, en el estadio Rock & Soccer a las 21:00 horas.
Para Juan Peralta, organizador del evento, este show es un culto a la música mundial. “Es una banda que no viene hace bastantes años, dos veces ha sido renombrada por la revista Rolling Stone como el mejor tributo a Queen y es un privilegio tenerlos acá”, apuntó.
El año pasado fue de grandes logros para la banda argentina, agotando dos presentaciones en el Movistar Arena de Santiago, tres fechas en el Gran Rex de Buenos Aires y con diversas presentaciones en una gira por España e Inglaterra.
La venta de entradas es a través del sistema Ticketplus.
Elogios
La agrupación viene de cosechar elogios impresionantes por todos los países que visitó, a tal punto que la Revista Rolling Stone los catalogó como “El mejor show de Queen del mundo. El mejor tributo de todos los tributos”. El Diario El País, de España, escribió “Freddie debe estar orgulloso”, The Guardian, UK, se refirió como “Es lo mejor que pasó después de Queen” y El Mundo de España afirmó que es “La reencarnación más fiel de Freddie Mercury”.
Su frontman, el encargado de encarnar a un Freddie Mercury es irrepetible, “realiza un despliegue de energía recorriendo todos los rincones del escenario. De un lado a otro… y vuelta a empezar. Como si fuera él. Como si hubiese heredado el ADN de una de las figuras más representativas de la música de todos los tiempos para ofrecer un ‘show’ apto para los más nostálgicos y adaptado para todos aquellos que nos quedamos con las ganas de ver un directo de la banda original”, agregó Peralta.
A lo largo del espectáculo, combinan de manera milimétricamente medida, los momentos de puro rock, un vaivén en el que, por supuesto, el vestuario también juega un papel fundamental. Porque Queen también era eso: la conjugación de la potencia vocal con la apariencia exterior con toques de extravagancia.