Según informe de gestión de la Contraloría General de la República, dado a conocer por El Mercurio, tres Universidades del Estado tuvieron déficit el año pasado donde encabezaron la lista la Universidad de Magallanes, de Los Lagos y de Antofagasta.
Ha sido una demanda de años: las 16 universidades del Estado han pedido constantemente que exista un «trato preferente» de parte de su «dueño» en cuanto a la entrega de recursos para que puedan funcionar. «Si pedimos financiamiento del Estado es porque somos capaces de responder», ha señalado en entrevistas Ennio Vivaldi, rector de la U. de Chile.
Y de acuerdo al informe de gestión financiera 2014 del Estado, que publicó la Contraloría, estas instituciones de educación superior tuvieron- según cifras preliminares- ingresos por $979 mil millones, siendo la U. de Chile la que captó cerca de un tercio de estos recursos ($393 mil millones). Le siguieron, pero bastante más atrás, la U. de Santiago ($79 mil millones) y la U. del Bío-Bío ($60 mil millones)
Juan Manuel Zolezzi, rector de la U. de Santiago, cuenta que los buenos resultados de su universidad se deben a «que hemos venido haciendo hace tiempo un ordenamiento en el tema de la gestión y diría que es un gran esfuerzo. Si se miran los excedentes del 2013, fueron cerca de $12 mil millones».
Las Universidades con déficit
No obstante el buen desempeño de estos planteles, el resultado del ejercicio reveló que tres universidades terminaron 2014 con déficit. La U. de Magallanes presentó pérdidas por $870 millones, siendo la cifra más alta entre todos los planteles públicos. En tanto, la U. de Antofagasta tuvo un déficit de $178 millones, mientras que la U. de Los Lagos, una merma de $152 millones.
Sobre esto, Zolezzi, quien hasta marzo fue vicepresidente del Consejo de Rectores, señala que «es complejo tener un buen desarrollo en regiones», por las distintas situaciones que deben afrontar.
«Si se mira Punta Arenas, ellos obviamente no pueden cobrar un arancel o un aporte mayor, pero esa universidad tiene que pagar remuneraciones mucho más altas que nosotros, por donde está ubicada», sostiene el rector. «Por eso insiste que hay que tener una especial preocupación por las universidades regionales, especialmente por las que están en zonas delicadas».
Gratuidad
En medio de la polémica por la gratuidad contemplada para 2016 en las universidades tradicionales, un grupo de rectores de las privadas preguntó públicamente cómo se financiarían los planteles estatales, pues ya algunas de estas instituciones que presentan problemas financieros.
Previamente, Ennio Vivaldi había indicado que «hay una preocupación obvia de que si lo que el Estado nos va a proporcionar implica un detrimento respecto de lo que se recibía» por concepto de aranceles, dado que no se reemplazaría la totalidad.
Y Zolezzi recalca que desde el Ejecutivo les han señalado que no habrá un detrimento en los aportes que actualmente reciben, y que ellos «son partidarios de la gratuidad»