El decreto de adjudicación del proyecto que ampliará la capacidad de operación del Aeropuerto Andrés Sabella llega en un momento justo, explicó el seremi de Obras Públicas, Pedro Barrios. Y no solo porque es evidente que en las horas punta la terminal ubicada en el extremo norte de Antofagasta queda superada por el flujo de pasajeros (2.315.000 durante el 2023), sino también por las proyecciones económicas de la zona y el impacto que suponen en el corto plazo. Según las cifras del gobierno, al primer semestre de este año, las iniciativas de inversión de origen extranjero para Antofagasta superaron los 15 mil millones de dólares, la mayor cifra del país y que representa la mitad del total de este tipo de inversión en Chile.
“Estamos dando el salto necesario para que la región cuente con un aeropuerto adecuado para la demanda, su proyección y las exigencias técnicas, tanto para pasajeros como para el movimiento de carga”, aseguró el titular regional de Obras Públicas.
Barrios informó que el mes pasado se publicó en el Diario Oficial el decreto de adjudicación del proyecto Red Aeroportuaria Norte, que junto a la terminal Andrés Sabella incluye el Aeropuerto Desierto de Atacama (Copiapó). Para ello se invertirán 316 millones de dólares que incrementarán la superficie del Andrés Sabella en un 208%, pasando de 21.230 m2 a 31.422 m2.
Entre las mejoras habrá 281 nuevos estacionamientos para vehículos y dos nuevos estacionamientos para aeronaves comerciales, totalizando 10 posiciones. Junto a ello tendrá cinco nuevos puentes de embarque y llegará a nueve en total; diez tótems de chequeo automático, 26 counter tradicionales, cinco puestos de control AVSEC (hoy existen dos), seis puestos de control de PDI (actualmente solo hay dos), un puesto de control de SAG/Aduana y cinco cintas de retiro de equipajes (dos en la actualidad).
- ¿Cuáles son las fechas del proyecto?
Es una concesión conjunta con el aeropuerto Desierto de Atacama en Copiapó, que pasará primero a explotación y en el 2026, cuando termina la concesión de Antofagasta, se entregará esta terminal. Son más de 316 millones de dólares en inversión y para nuestro caso contempla una ampliación de un 208% de la superficie; habrá una nueva torre de control, más mangas para embarques y un incremento en la zona de estacionamientos, todas mejoras para el bienestar de los pasajeros y los funcionarios.
Como región tenemos dos aeropuertos, Calama y Antofagasta, que registran los mayores tráficos de pasajeros en el país, cerca de dos millones anuales por cada uno. Hoy en las horas peak ya hay una acumulación importante en ambos y el año pasado partió la concesión de El Loa. En enero se entrega Copiapó y en febrero del 2026 será Antofagasta para la remodelación y ampliación.
- ¿Cuáles son las mejoras más importantes que traerá la remodelación?
La torre de control es un tema importantísimo para el movimiento aéreo, pero como usuarios veremos un terminal mucho más grande, que se extenderá hacia el sur y el oriente. El aeropuerto será más ancho y largo, con más puertas de embarque, para atender una gran cantidad de naves en simultáneo, junto a mejores zonas para la atención de pasajeros. Los counters serán mejores, con más espacio y volumen, porque actualmente en horas peak el aeropuerto no es suficiente para la cantidad de personas que llega. La gente del terminal también tendrá mejores instalaciones, en general, será un mejor estándar para los usuarios y quienes trabajan en el lugar.
- ¿Cuál es el plazo proyectado para la ejecución de los trabajos?
Deberían comenzar con ingeniería el primer trimestre del 2026 y la proyección es de cuatro años de desarrollo.
- En la Región Metropolitana se remodeló el aeropuerto internacional y fueron necesarias algunas adecuaciones para su funcionamiento hasta el fin de las obras. ¿Veremos una situación parecida en Antofagasta, zonas que no podrán utilizarse?
El anteproyecto referencial es acotado en eso, no hay una demolición de toda la terminal, hace ampliaciones importantes.
- También es un proyecto importante para la conexión aeroportuaria.
El aeropuerto no solo tiene operaciones de pasajeros, también cuenta con operaciones de carga, productos para la minería o la industria energética. Esto tendrá mejoras y la principal importancia es que estamos dando el salto necesario para que la región cuente con un aeropuerto adecuado para la demanda, su proyección y a las exigencias técnicas, tanto para pasajeros como para el movimiento de carga.
- Esta ampliación llega en un momento en el que Antofagasta cuenta con multimillonarias proyecciones de inversión, lo que permitirá amortizar un eventual mayor flujo de pasajeros y de carga.
Estamos en un momento importante, porque la región está concentrando buena parte de la inversión nacional. Además, debemos recordar que viene el corredor bioceánico, lo que también podría relacionarse con un crecimiento aéreo. Disponer de las condiciones, contar con terminales con las capacidades adecuadas para que operen naves modernas y de tamaño considerable en simultáneo será muy importante. Y nuestros dos terminales aéreos quedarán en buenas condiciones para aquello.
