Varias características singulares del sismo ocurrido en la tarde del domingo en la costa de la Región de Tarapacá, llamaron la atención de los expertos de la Universidad Católica del Norte (UCN), quienes analizan la situación.
En primer lugar, pudieron determinar que tuvo un plano de ruptura con una orientación oblicua (más o menos en dirección este-oeste) respecto de la dirección de la fosa (norte-sur), lo que no es habitual para sismos cercanos a ésta.
Lo mismo ocurre con la profundidad que, si bien aún no se puede precisar en detalle, se ha informado que es un evento menos profundo de lo esperado. Algunas agencias coinciden en una profundidad de 18 a 20 kilómetros para el sismo principal.
Además, hay un gran número de réplicas situadas a profundidades de 10 kilómetros, que están en la placa superior y no en el contacto interplaca (donde se juntan las placas de Nazca y Sudamericana).
Las afirmaciones las hizo el geólogo de la UCN e investigador de terremotos del Centro Nacional de Investigación para la Gestión Integrada de Desastres Naturales (CIGIDEN), Dr. Gabriel González, quien explicó que podría tratarse de una falla geológica distinta al contacto entre la placa de Nazca y la Sudamericana.
Esta hipótesis en particular debe ser evaluada para llegar a una conclusión definitiva.
¿PRECURSOR?
El Dr. González manifestó que en la eventualidad que el sismo de magnitud 6.7 estuviese ubicado en el contacto interplaca, hay que considerar la posibilidad que éste sea un precursor de otro mayor. Por lo tanto, concluyó que es fundamental determinar con la mayor precisión posible la posición en profundidad de la falla que causó el sismo recién pasado.
Los terremotos no siguen un patrón regular, pero sí es conocida la existencia de sismos precursores, dijo, y en este caso “no podemos aún afirmar que éste sea un sismo que va a desestabilizar la región para generar un sismo mayor, por lo tanto, hay que estar atentos a lo que pueda suceder en los próximos días”.
TSUNAMI
Los especialistas de la Universidad Católica del Norte hicieron también una primera evaluación del tsunami generado a raíz del sismo, el que, según indicaron, fue bastante pequeño y originó variaciones del nivel del mar.
El Dr. González puntualizó que la máxima altura detectada fue en Patache (Iquique), alcanzando 28 centímetros (en Iquique 17 cms., mientras que en Arica fue del orden de los 9 cms).
“Éste, fue un fenómeno muy asimétrico en cuanto a las variaciones de altura del nivel del mar a lo largo de la costa; contrario a lo que podríamos esperar de un evento generado en el contacto entre la placa de Nazca y la Sudamericana”, agregó.
ENSEÑANZAS
El equipo de investigadores en la zona norte, liderados por el Dr. Gabriel González, está integrado por el Dr. Pablo Salazar, y Juan González y Emad Kamal, candidatos a Doctor en Geología, entre otros expertos.
Su trabajo incluye además un modelo de propagación del evento tsunamigénico, tratar de relocalizarlo, y ver en detalle sus características. Los profesionales forman parte del Centro Nacional de Investigación para la Gestión Integrada de Desastres Naturales (CIGIDEN), quienes aseguraron que continuarán evaluando el sismo, el que deja varias enseñanzas en los ámbitos sismológico, geológico y tectónico, así como también desde el punto de vista de la evacuación.
EVACUACIÓN
Aunque ésta se desarrolló bastante bien, con una alerta, logrando la salida del sector cortero de más de 80 mil personas, hubo aspectos negativos que dan pie a estar atentos a mejorar, señaló el Dr. Gabriel González, indicando que esto significa un aprendizaje para las autoridades y la población para manejar de mejor forma estos eventos.
Es así como la ciudadanía no debe trasladarse en vehículos, porque es perjudicial para el proceso mismo, puede causar atropellos y congestión; las personas se desplazaron lentamente, llevando todo lo que tenían en la playa, lo que resta tiempo y velocidad.
Al respecto, enfatizó que se debe informar a la comunidad que la evacuación debe hacerse a pie, y que deben hacerlo aún estando en zona segura, teniendo en consideración que la estimación de la posición de esta zona puede tener algún rango de error.
Recalcó la necesidad de contar con sistemas de alerta temprana eficientes que permitan salvar vidas.
En este aspecto, recordó que el año recién pasado fue presentado un proyecto que aspiraba a contar con financiamiento local para instalar una red de monitoreo de terremotos basada en GPS, la que, según explicó, en última instancia no fue considerada.