En el marco de las investigaciones por el fraude al interior de Carabineros, una de las próximas personas citadas a declarar será el ex obispo de Antofagasta, Pablo Lizama.
Según La Tercera, de acuerdo a un informe entregado por la Contraloría, el religioso forma parte de un grupo de 300 personas que reciben doble pensión por parte de la Dirección de Previsión de Carabineros (Dipreca) y de la Caja de Previsión de la Defensa Nacional (Capredena).
Lo anterior corresponde a los casos en que los beneficiados ejercieron funciones tanto en Carabineros de Chile como en otra institución de las Fuerzas Armadas, tal como ocurrió con el mencionado sacerdote que se desempeñó como obispo castrense entre 1994 y 2004, mientras que su ejercicio como obispo de Antofagasta se extendió entre los años 2004 y 2016.
Al ir al desglose, se logró acreditar que Lizama obtiene una pensión como coronel (R) de Carabineros por $1,9 millones. En tanto, como general de brigada del Ejército su jubilación asciende a $2,2 millones.
Incluso, se le otorga una tercera pensión en su calidad de profesor en Carabineros por $486 mil. Sumadas las tres jubilaciones, se alcanza un total $4,9 millones mensuales.
Si bien Lizama ya declaró como testigo, el Ministerio Público decidió citarlo como imputado durante esta semana. En la instancia, se deberá determinar si el arzobispo emérito protagoniza un caso de simple negligencia o derechamente hubo dolo para favorecerlo.
En tanto, entre las opciones que se manejan como explicación para esta condición es que Lizama sea de las personas a las que se les sumaron los años de servicio en las dos cajas, pagándose dos veces. Para la Fiscalía, esto no corresponde, pues deben sumarse los años, sacar un total, y pagar solo una jubilación.
