Tras salir del Senado, el trabajo para una nueva ley de inteligencia “duerme” en el Congreso porque “hay un sector del Frente Amplio y de los partidos que apoyan al Presidente Gabriel Boric que no les gusta la ley de inteligencia, que siguen mirando la situación de Chile como si estuviéramos recién saliendo de la dictadura”, criticó el senador Pedro Araya (IND-PPD). La actual legislación no sirve para enfrentar la nueva criminalidad que opera en el país, afirmó el parlamentario, quien espera que con el caso del militar venezolano que fue víctima de secuestro y homicidio, pero también con el historial de otros delitos asociados al crimen organizado, el Parlamento avance en implementar una ley que responda a lo que el país necesita en seguridad pública.
En este debate agregó que llegó el momento de discutir una reforma estructural en Carabineros, descartando ideas refundacionales y sobre todo considerando que las decisiones que hoy se toman darán resultados en cinco o diez años, por lo que no hay tiempo que perder. Hay muchas trabas que tienen que ver con el diseño de la institución, dijo Araya, un modelo que probablemente fue exitoso en los años 90 o 2000, pero que ya está agotado.
“Necesitamos un sistema de inteligencia que permita recabar información previa a la comisión de delito y eso hay que hacerlo a través de un sistema integrado en el que los distintos actores trabajen en conjunto. Esperamos que no solamente este caso (secuestro y homicidio de militar en retiro venezolano), sino que otros delitos de mucha gravedad lleven a entender a parte importante Frente Amplio que es necesario avanzar en la ley de inteligencia”, explicó el senador.
Sobre otros temas de contingencia en el país, el parlamentario sostuvo que, en pensiones, la fórmula que propone el gobierno es la que garantiza que éstas experimenten un aumento para quienes hoy dependen de esos ingresos. A días de que se cumplan dos años del gobierno del Presidente Boric, Araya reflexionó que la administración comenzó con bastantes traspié, pero que ha logrado estabilizarse y mejorar con el tiempo la gestión en algunas cosas, “aunque sin duda está al debe en muchas otras. Y uno de los temas en los que está al debe tiene que ver con la seguridad pública”.
¿Cómo debe destrabarse la discusión por la reforma previsional?
El Senado tiene una tremenda responsabilidad de generar un acuerdo con el objeto de, una vez por todas, resolver el tema previsional y en esto tendrán que ceder todas las partes en pos de un acuerdo. A mi juicio, no sirven los maximalismo por parte del Gobierno, ni tampoco por parte de la derecha, tenemos que buscar un equilibrio que al final del día tengan el centro a los chilenos y chilenas, de forma tal de pensar en ellos y no en la industria al momento de avanzar en la reforma para tener pensiones dignas.
¿Eso implica no inclinarse por ninguna fórmula y buscar un equilibrio?
Al revisar los antecedentes, una de las fórmulas que permite que efectivamente las pensiones puedan crecer en una cantidad importante para los actuales pensionados y para los futuros, es la fórmula que ha propuesto el gobierno. Que el 6% que se colocará como cotización adicional vaya solamente capitalización individual no resolverá el problema y será inviable un aumento real de pensiones. Terminaremos con un aumento marginal y no uno sustancial. En ese sentido, creo que la fórmula que se ha propuesto del 3-3 ayudaría a destrabar el tema y a subir las pensiones. Y lo otro es que, en el tema previsional, algo que ha afectado mucho la discusión, es que hay muchas fake news respecto de la reforma previsional. Hay mucha desinformación por parte de algunos sectores, especialmente los que están interesados en que no se modifique el actual sistema, porque todos sabemos que es un negocio muy lucrativo no para quienes cotizan, sino para un grupo privilegiado de empresas que logran tener con los fondos de los trabajadores un capital para desarrollar sus actividades comerciales.
En salud, ¿de qué forma podría zanjarse la situación de las isapres?
Para nadie es un misterio que el problema de las isapres se generó producto de que ellas no acataron en su oportunidad a los distintos fallos, tanto del Tribunal Constitucional, como de la Corte Suprema. Todo esto llevó a al último fallo de la Suprema que las dejó en una situación bastante compleja. En el Senado despachamos hace pocos días la ley corta de isapres que busca, más que darle un salvataje, evitar que el sistema de salud en su conjunto quiebre o colapse y al final del día no se entregue atención a miles de personas. Con esta ley corta buscamos dar cierta garantía de que el sistema funcione haciendo cumplir el fallo de la Corte Suprema.
¿En esta discusión debe considerarse un fortalecimiento a Fonasa?
Una de las cosas que discutimos en la ley corta y la ley de presupuesto del año pasado tiene que ver con el fortalecimiento de Fonasa, porque hemos visto una migración importante de pacientes de isapre a Fonasa. Y es muy probable que muchos usuarios sigan migrando en las próximas semanas y ante la eventualidad de quiebras de isapres, esos pacientes, probablemente un grupo importante, pasará a Fonasa. Eso implica que el sistema tiene que estar preparado para recibir una mayor cantidad de cotizantes que tal vez tienen un perfil distinto al usuario habitual y la ley corta también se hace cargo de este tema. La complejidad que planteamos es que más que la quiebra de las isapres puede ocurrir que esto traiga un efecto en cadena respecto de muchos prestadores de salud, como centros médicos, que son acreedores de las isapres y que en la eventualidad de una quiebra no podrán continuar con el servicio. Le pedimos al gobierno que la ley corta garantice que habrá una continuidad de las prestaciones médicas, tanto para quienes se atienden en isapres como en Fonasa, porque muchos de estos últimos se atienden en centros médicos privados que podrían ser arrastrados por la quiebra de las isapres.
¿El tema con Fonasa es netamente económico o de gestión?
Es una mezcla, porque Fonasa está preparada para recibir una determinada cartera de personas y si experimenta un aumento se necesitará mejorar los procesos de gestión, probablemente tener más personal y sucursales. Pero también hay un tema de costo financiero, porque la prestaciones que cubre Fonasa hoy tiene un cierto rango, entonces de llegar un nuevo público será necesario un aumento financiero para cubrir esas prestaciones.
¿Qué evaluación tiene del gobierno a días de cumplir dos años en la administración del Estado?
Al gobierno del Presidente Boric le ha tocado enfrentar distintos escenarios complejos, los que van desde temas económicos hasta temas de seguridad pública. Es un gobierno que empezó con bastantes traspié, pero que ha logrado estabilizarse y mejorar con el tiempo la gestión en algunas cosas, aunque sin duda está al debe en muchas otras. Y uno de los temas en los que está al debe tiene que ver con la seguridad pública.
LEY DE INTELIGENCIA
¿Con el caso de secuestro y homicidio de un militar ( r ) venezolano debería cobrar fuerza el trabajo para la nueva ley de inteligencia, por qué duerme en el Congreso?
Esta ley duerme en el Congreso porque hay un sector del Frente Amplio y de los partidos que apoyan al Presidente Gabriel Boric que no les gusta la ley de inteligencia, que siguen mirando la situación de Chile como si estuviéramos recién saliendo de la dictadura. Hay una profunda desconfianza de lo que puede hacerse con los sistemas de inteligencia. Tenemos una ley que es fruto de un consenso que se dicta a poco andar de recuperada la democracia y tiene mucha desconfianza respecto de qué es lo que pueden hacer los servicios de inteligencia, porque estaba muy vivo el recuerdo de lo que fue la CNI o la Dina. Entonces nuestra actual ley de inteligencia en la práctica no sirve para enfrentar los desafíos que tiene Chile hoy. En el Senado hicimos un trabajo importante con senadores de distintos sectores políticos a fin de generar un modelo de sistema de inteligencia que responda a la realidad que tiene Chile actualmente para enfrentar fenómenos como el crimen organizado, el narcotráfico y otros delitos respecto de los cuales la autoridad política necesita información para saber cómo actuar. Además, esa información que se levante a través del sistema de inteligencia debe servir en su minuto para perseguir a delincuentes. Ahí se generó un problema por parte del Frente Amplio, que cree que es un modelo que no garantiza que eso se vaya a cumplir. En lo personal digo que propusimos junto a los senadores de la comisión de defensa, que el sistema de inteligencia no tiene que estar solamente entregado a las Fuerzas Armadas de Orden y Seguridad, sino que debe existir un modelo que integre también a personal civil. De hecho, hicimos una propuesta, por ejemplo, para que, en el nuevo sistema de inteligencia, los funcionarios de las Fuerzas Armadas que fueran destinados a trabajar en la oficina nacional de inteligencia dependieran directamente el director de inteligencia y no de sus respectivos mandos para los efectos del cumplimiento de las metas. Asimismo, propusimos que se integraran civiles con distintas capacidades técnicas para formar un equipo multidisciplinario y enfrentar fenómenos delictuales que el país necesita resolver.
¿El crimen de este militar venezolano debería impulsar nuevamente esta ley?
Todo delito que se comete en Chile es preocupante y más aun lo que ha ocurrido con este secuestro con homicidio. Tengo plena confianza de que el Ministerio Público está haciendo el trabajo, ya hay una persona detenida, están identificados los otros partícipes y esperamos que la fiscalía pueda prontamente resolver el crimen y aclarar cuáles fueron las reales motivaciones de este secuestro con homicidio. Dicho eso, necesitamos sistema de inteligencia que permita recabar información previa a la comisión de delito y eso hay que hacerlo a través de un sistema integrado en el que los distintos actores trabajen en conjunto. Esperamos que no solamente este caso, sino que otros delitos de mucha gravedad lleven a entender a parte importante Frente Amplio que es necesario avanzar en la ley de inteligencia.
¿Es el momento ejecutar una reforma a Carabineros, como lo planteó en su momento la izquierda?
La reforma a Carabineros es un tema que viene discutiéndose hace bastantes años. Carabineros necesita una reforma estructural, lo mismo la PDI y por una razón muy sencilla, porque las lógicas que tenemos de nuestras policías estaban pensadas probablemente para los años 80, 90 y 2000, cuando el perfil de la criminalidad era otro y las funciones que cumplían eran muy distintas. Ahora vemos que las policías tienen que enfrentarse a bandas criminales, crimen organizado y se necesita una preparación distinta. Por ejemplo, hay que discutir de una vez por todas si Carabineros seguirá con la dualidad de control de orden público por una parte y con la investigación criminal. Esos son los temas para abordar, no estoy la tesis de refundar Carabineros, porque es una institución que ha prestado un gran servicio a Chile, con un sacrificio que realizan día a día miles de hombres y mujeres para llevar seguridad a las familias chilenas. Pero estoy consciente de que necesitamos un carabinero acorde a los desafíos del país en este siglo y esa es una reforma de carácter estructural relacionada con las funciones de Carabineros y la formación que requiere.
¿Existe el ambiente político para que esto sea una prioridad?
La principal prioridad de país y de todos quienes ejercemos cargos públicos debiera ser la seguridad pública. En ese contexto creo que es el minuto de discutir de una vez por todas una reforma estructural de Carabineros para que estén a la altura de los desafíos del país. Hay muchas trabas que tienen que ver con el diseño de la institución, que probablemente fue diseño exitoso en los años 90 o 2000, pero que ahora no responde a la realidad. En ese sentido, hoy es el minuto de hacer esa discusión, porque, además, debemos tener presente lo siguiente. Cualquier decisión que tomemos con Carabineros, sea cual sea, tendrá resultados no antes de cinco o diez años y mientras más demore esta discusión, más alargamos un problema.
¿Cómo observa el desempeño del Ministerio Público en el caso convenio y sus diferentes causas?
Ha tenido una muy buena actuación, porque vimos que rápidamente se ha conocido qué fue lo que ocurrió, hay personas imputadas, algunas de ellas cumplieron medidas cautelares bastante gravosas y sigue la investigación. Esperamos que los plazos fijados por los juzgados de Garantía se cumplan de forma tal de que, en ese tiempo, se puedan realizar los distintos juicios para determinar las responsabilidades de quienes participaron en estos delitos.
