El virus respiratorio sincicial (VRS) representa el 48% de los virus detectados en la vigilancia de laboratorio realizada por el Instituto de Salud Pública (ISP) en el país, cifras que tienen a los niños menores de un año como el grupo etario más afectado. Según el informe de Circulación de Virus Respiratorios, en la semana 25, la predominancia que tuvo el SARS-Cov-2 durante el 2020 y el 2021 continúa siendo desplazada drásticamente y en ese mismo periodo alcanzó un 6,7%.
El informe del ISP detalló que con un 48%, el VRS es el virus detectado con mayor frecuencia y le siguen casos de Metapneumovirus (16,2%), Influenza A (15,2%), Parainfluenza (9,4%), SARS-CoV-2 (6,7%) y Adenovirus (3,8%).
La dinámica de cambios se aprecia al comparar las estadísticas de la semana 25 con años anteriores. En el 2018, el número de casos positivos por virus sincicial llegó a 528, en el 2019 fueron 445, en el 2020 solo hubo un caso, el 2021 registró siete y este año, 897. Y al revisar los datos acumulados de la semana 1 a la 25, se confirma que el VRS aumentó más del doble, 2018 (2.068); 2019 (1.619); 2020 (46); 2021 (50) y 2022 (5.623).
El jefe de Pediatría del Hospital Regional de Antofagasta, Antonio Cárdenas, explicó que en el 2020 y 2021 hubo un predominio de la circulación de covid en un contexto en el que los niños estuvieron encerrados y no tuvieron posibilidad de entrar en contacto con virus invernales. “Sin embargo, este año con la apertura de todos los colegios, los niños se enfrentan sin experiencia inmunológica a estos virus y como la mayoría no tenía anticuerpos, esto fue como una chispa en una pradera seca, sobre todo con los menores de uno o dos años que tenían esta deuda inmunológica frente a un virus que es tan común”, señaló.
En estas condiciones, el médico dijo que el sincicial reemplaza al covid como agente principal, sin que este último se ausente y junto a ellos, aparece la parainfluenza o el adenovirus.
“El virus sincicial está relacionado con el frío, ya que en el invierno las personas pasan más tiempo en habitaciones cerradas y salen menos, lo que favorece su circulación. La enfermedad compromete el aparato respiratorio alto o bajo, ese es su nicho, en cambio el covid no solo ataca el aparato respiratorio, también tiene el potencial de hacerlo con cualquier sector del organismo, incluyendo el corazón, el cerebro, aparato digestivo o la piel”, precisó el pediatra.
LOS MÁS AFECTADOS
Cárdenas sostuvo que para la mayoría se trata de un resfrío, pero indicó que es especialmente grave en los niños menores de un año, en quienes produce un cuadro que se llama bronqueolitis, con un 10% que requiere oxigenación y un 3% que necesita hospitalización.
“Los más afectados son los lactantes, sobre todo los menores de un año. No es habitual ver a niños más grandes, pero como los que hoy tienen dos años y les llamamos hijos de la pandemia, porque estuvieron encerrados todo este tiempo, a ellos que tienen dos y tres años los ataca por igual. Pero mientras más pequeños sean, el cuadro será más grave por sincicial”, declaró.
El médico argumentó que es una enfermedad imposible de prevenir, recordando que tener a los niños encerrados es una situación anómala. “Como no existe vacuna, en algún momento tienen que exponerse al virus para que tengan defensas, es un proceso propio de la vida. Existe una medida de defensa, pero es solo para niños que fueron prematuros extremos, menos de un kilo y medio que estuvieron en ventilación mecánica. Cuando comienza el invierno a ellos se les coloca unas inmunoglobulinas defensivas, pero es solo autorizado para esos casos”, advirtió.
La semana pasada, Lilian Correa, jefa (s) del Departamento de Salud Pública de la Seremi de Salud de Antofagasta, se refirió al aumento del virus sincicial y pidió a la comunidad realizar consultas tempranas en los grupos de riesgo, niños, adultos mayores y quienes presenten patologías que afecten su inmunidad. “Si tienen alguna enfermedad respiratoria es importante que consulten tempranamente y el objetivo es que no se agrave para intervenir a tiempo y realizar el tratamiento que corresponda”, recomendó.
Margarita Lay, doctora en Virología Molecular y Microbiología y directora del Centro de Investigación en Inmunología y Biotecnología Biomédica de la Universidad de Antofagasta (UA), remarcó las diferencias entre el sincicial y el covid, expresando que se comportan de maneras diferentes. “El VRS tiene una alta prevalencia en los meses fríos, pero este no ha sido caso del SARS-CoV-2. Recordemos que, por lo menos la variante ómicron, se presentó en la estación fría en el hemisferio norte y en la estación cálida en el hemisferio sur. En nuestro país, por ejemplo, la última ola fue en febrero, o sea, en el verano, así que diría que son comportamientos diferentes y el SARS-CoV-2 no se podría asociar aún a una estación en particular, como se hace con el VRS”, afirmó.
Respecto del desarrollo de la pandemia, la especialista de la UA informó que lo visto con la variante ómicron es que ha sido la dominante no solamente en nuestra población si no que, en la población mundial, es más contagiosa, pero menos virulenta que las variantes anteriores. “En ese sentido podríamos decir que, en la pandemia, en lo que tiene que ver con su manifestación como enfermedad severa y masiva, sí se está viendo una remisión, pero eso no significa que el virus en sí esté disminuyendo su presencia, porque seguimos con un gran número de personas que se siguen contagiando con el SARS-CoV-2. Por eso debemos seguir alertas y en constante vigilancia, como también con otros virus respiratorios”, puntualizó.