12.6 C
Antofagasta
jueves, 22 agosto, 2024
spot_img
Elecciones 2024

«Los venezolanos difícilmente votarían por la izquierda»: Expertos analizan el voto migrante en Antofagasta

Una estimación del Servicio Nacional de Migraciones indica que en la región de Antofagasta residen 109.439 extranjeros. Después de la Región Metropolitana, esta zona es la segunda del país en la cantidad de migrantes internacionales residentes, por ello reviste importancia las ideas que se presentan en el Congreso, como el proyecto para limitar la participación de este grupo en los comisiones parlamentarios y presidencial. Sin embargo, aquello también es visto como un cálculo político electoral, ya que con el retorno del voto obligatorio y la presencia de venezolanos que escaparon del régimen chavista, aumentan las dudas sobre el comportamiento que tendrán los extranjeros en las urnas.

La votación en el Senado que terminó con la eliminación de multas a quienes no cumplan con la obligatoriedad de sufragar en las elecciones abrió nuevas discusiones sobre la participación del segmento migrante en los procesos electorales. Los comicios de octubre serán los primeros de carácter obligatorio desde el 2009, lo que plantea varias interrogantes para los partidos en términos de preferencia en las urnas y el nivel incidencia de la población extranjera. La posibilidad de realizar cambios en el voto de los migrantes en un año con elecciones es visto como un mero cálculo político por los especialistas, quienes consideran que existen una serie de variables que inclinarían el apoyo de un grupo que no es monolítico.

Una estimación del Servicio Nacional de Migraciones indica que en la región de Antofagasta residen 109.439 extranjeros y las proyecciones del INE señalan que la población total llegaría a 607.000 personas. Después de la Región Metropolitana, esta zona es la segunda del país con la mayor cantidad de migrantes internacionales residentes, por ello revisten importancia las ideas que se presentan en el Congreso, como el proyecto para limitar la participación de este grupo en los comicios parlamentarios y la presidencial. Sin embargo, aquello también es visto como un cálculo electoral, ya que con el retorno del voto obligatorio y la presencia de venezolanos que escaparon del régimen chavista, aumentan las dudas sobre el comportamiento que tendrán los extranjeros en las urnas.

Alberto Torres, sociólogo y académico de la Universidad de Antofagasta (UA), sostuvo que algo que no debe ocurrir es establecer distinciones de que el migrante pueda votar obligatoriamente en una elección, mas no en la otra. “Lo mismo ocurre cuando se habla del voto obligatorio, que será un voto voluntario encubierto, porque no habrá una multa. Creo que la sensación de la gente es que los políticos comienzan a acomodar sus cálculos electorales a estas decisiones. Cuando conviene que vote el migrante en un proceso se deja como obligatorio y quizás se actúa de forma contraria en otra instancia electoral”, advirtió.

Torres manifestó que la preferencia política de este segmento es diversa. En esto inciden factores como quienes vienen a cometer delitos, lo que lleva a que el resto de los extranjeros se sienta estigmatizados. “Por lo tanto, esos son migrantes que podrían votar por una opción más bien de derecha moderada o dura en temas de seguridad. Como también podríamos tener migrantes que voten más por la izquierda debido a las flexibilidades en el ingreso, porque evita la estigmatización y todo ese discurso”, subrayó.

Factor Venezuela: Izquierda dura

El sociólogo dijo que es muy probable que la migración venezolana manifieste su descontento contra los gobiernos de izquierda por la experiencia de su país. “Es muy probable que así sea, porque tienen internalizado el modelo político de la izquierda más dura, que fue lo que se trató también de hacer aquí con el presidente Boric, lo que finalmente se fue moderando en el tiempo, ya que Chile no es un país aclimatado a ese tipo de régimen. Si pensamos en el factor del chavismo y el gobierno de Maduro, esos migrantes quizás podrían votar por posiciones más bien conservadoras, pero también influirá mucho la estigmatización del migrante”, explicó. En esto influye cómo se concibe el fenómeno migratorio, porque tal vez la derecha presente un discurso antiinmigrante, colocándolos a todos en el mismo saco para restar beneficios y limitar el ingreso, mientras que la izquierda exhibiría un discurso diferente.

El sociólogo expresó que, si bien es cierto que el gobierno ha moderado su postura frente a la migración, porque ahora diferencian a quienes vienen a delinquir, en el inicio esta posición no era así, sino más bien muy similar a la que tuvo el gobierno de Bachelet cuando promovió el enfoque de que todos los migrantes fueran acogidos por el país.

En cuanto a los cambios electorales que están en pleno proceso, Torres dijo que la sensación que queda en la sociedad es que nuevamente los partidos políticos, en general, están acomodando sus cálculos. Y recordó que cuando se realizó el plebiscito de entrada el voto fue voluntario, sin embargo, en el plebiscito de salida el sufragio fue obligatorio. “La pregunta es porqué se hacen esas diferencias y que creo que a futuro los historiadores tendrán mucho que aportar en esa discusión que todavía no está clara”, puntualizó el académico de la UA.

Votación por segmentos

Cristian Zamorano, doctor en Ciencias Políticas, explicó que la tendencia del voto migrante es relativa al depender los propios segmentos de esa población. No existe un bloque monolítico, analizó, porque algunos de ellos son profesionales, otros comerciantes, están los que trabajan en servicios y quienes viven en campamentos.

“Si la categoría social del migrante sube es más probable que vote a la derecha, en el caso de los venezolanos, difícilmente votarían por la izquierda, ya que están huyendo de un régimen de ese color político. En cuanto a los campamentos, pienso que la votación iría más a la izquierda. De hecho, hay una persona del gabinete del gobernador Ricardo Díaz que dirigía una ONG que trabajaba con los dirigentes de las tomas. Muchos piensan que ese voto compuesto por inmigrantes representa un batallón interesante electoralmente hablando para la izquierda”, apuntó.

El experto manifestó que un discurso antiinmigración de la derecha no sería un gran impedimento para que los extranjeros voten por ese sector político. Esto, porque el migrante honesto se ve empañado por quienes llegan a delinquir y ante eso, verían conveniente que se restrinja el ingreso y simplemente queden los que vienen trabajar, para reducir la discriminación por culpa de los delincuentes.

“La pregunta es si los inmigrantes podrían tener un representante elegido basándose en ellos como electorado. En una elección como la de concejal podría ser, como en Estados Unidos y el voto latino, pero eso todavía no es parte de la tradición republicana chilena en elecciones. El gran empresario tiene sus candidatos, lo mismo los sectores populares, sin embargo, todavía no llegamos a ese nivel con los migrantes, aunque eso podría suceder en el futuro, porque el sistema de mercado busca segmentar para enviar mensajes precisos”, detalló Zamorano.

Sobre la idea del cálculo político para modificar las exigencias y requisitos del voto, el doctor expuso que es un hecho cierto y que simplemente debemos mirar el porcentaje en la elección de un gobernador, un 40%. “¿Tiene sentido, por qué es necesaria una segunda vuelta si el primero no llega al 40%? Cada vez que se establece una elección hay un cálculo y ahora vemos que a la clase política le costó mucho interpretar este voto obligatorio. Como existen dudas, regresar a lo anterior, modificar o restringir, significa que la visión electoralista de la democracia, los mecanismos para llegar al poder son más importantes que los principios”, afirmó.

Zamorano también planteó que el oficialismo no entiende por qué se les escapó el voto de las clases populares, interrogante que aún no puede resolver, por qué el sector obrero, la clase media baja, se fue a la derecha. “No comprenden por qué el ‘facho pobre’, expresión que detesto, es mayoritario en los sectores populares, eso preocupa en la izquierda más que el voto migrante”, aseguró.

Sensibles a los discursos

El sociólogo y exacadémico de la Universidad de Antofagasta, César Trabucco, señaló que la inclinación política de los migrantes debe analizarse por país, porque no es lo mismo el voto migrante venezolano que el boliviano.

“Hay que establecer diferencias en función del país de origen, puesto que es esperable que, si vienen arrancando de un régimen de izquierda o de derecha, tendrán una orientación base para mirar los problemas desde esa perspectiva. Si alguien viene arrancando del gobierno de Venezuela, lo más probable es que sea de derecha y mirará con esos ojos la política donde esté. Pero hay un dato fundamental, creo ellos tenderán a votar por aquella coalición que ofrezca más garantías en términos de servicios”, indicó. Y como ejemplo citó propuestas como una política habitacional promigrante, entregar facilidades en educación y el acceso a la salud. Esto, al tratarse de personas que cuando llegan dependen mucho de los servicios sociales del país, representando casi un voto dependiente.

“No es lo mismo para un migrante que un gobierno mantenga políticas habitacionales para generar acceso a viviendas a otro que diga que lo primero que hará en el poder es sacar los campamentos. Son muy sensibles al discurso relacionado con prestaciones sociales y tengo la impresión de que lo primero que observan es la política migratoria, qué dicen públicamente de los migrantes, porque si el discurso antiinmigración, no conseguirán el voto de esa población”, enfatizó el sociólogo.

En el caso de los extranjeros que llevan años en el país, Trabucco recalcó que tienden a apoyar el sector que proponga mayor estabilidad, porque precisamente escaparon de una situación que no era buena.

“Por lo tanto, si el tema de la estabilidad es importante para cualquier persona, lo será aún más para quien viene trashumando en busca de tranquilidad. Creo que estarán fuera de los extremos, observarán más a quienes les den garantías de estabilidad y mantengan los servicios. De esa forma, los diferentes sectores políticos deben explicitar su mirada respecto del fenómeno migratorio. Podrían tener algo que en Chile denominaríamos una orientación clientelista de la política, qué es lo que me ofrecen. El clientelismo existe bastante en Chile, pese a que se quiere ocultar. Este sector estará proclive a qué le ofrecen para decidir su voto”, destacó el sociólogo.

COMPARTE ESTA NOTICIA

2 COMENTARIOS

  1. Yo diría lo contrario, la izquierda globalista es que le han dado la posibilidad y todas la facilidades para que inmigrantes de Venezuela de forma legal e ilegal entren al.pais..

Deja una respuesta

¡Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- publicidad -spot_img
- publicidad -spot_img
- publicidad -spot_img
- publicidad -spot_img
- publicidad -spot_img
- publicidad -spot_img
- publicidad -spot_img

Más artículos como este