Largos desafíos hemos enfrentado desde los albores de la incorporación de mujeres en diferentes espacios sociales y productivos. Si en cada actividad el género femenino ha ganado terreno tras prolongadas luchas, la minería no es la excepción. Recordemos que hasta 1996 las mujeres en Chile no podíamos entrar a faenas por una restricción del Código del Trabajo, la cual fue derogada ese año.
Pero el mundo ha cambiado y hoy en Antofagasta Minerals vemos en la diversidad e inclusión categorías mínimas para una actividad productiva sostenible y sabemos que construir un ambiente laboral bajo esta premisa nos hace ser más competitivos. Esto pues nos permite sumar a nuestra dotación a la mitad del talento disponible, generando equipos de trabajo diversos en capacidades y habilidades y, por ende, mejor preparados para el cumplimiento de los objetivos del negocio.
Esta convicción nos ha llevado a que, a través de nuestra Estrategia de Diversidad e Inclusión implementada desde 2018, hayamos alcanzado en 2021 un 17,4% de participación laboral femenina, situándonos por sobre el promedio de la industria. Un camino de crecimiento que seguiremos recorriendo bajo la visión de que a fines de 2022, una de cada cinco personas que trabajen en el Grupo Minero sean mujeres.
En Minera Zaldívar alcanzamos un 11,4%, lo cual significa asumir un desafío significativo para aportar a esta meta. En ese sentido, nuestro programa de Aprendices 2022 ya comenzó su proceso de inducción y entrenamiento, donde la mayoría de los participantes son mujeres provenientes del territorio en que operamos, y que se sumarán a una tradición de mujeres forjadoras de la actividad. Una de ellas es Geraldine Véliz, quien luego de más de 10 años como operadora en Zaldívar se transformó en la primera instructora mujer de operación de camiones de alto tonelaje del país, un gran orgullo para nuestra Compañía.
Estamos conscientes de que una cosa es contar con más mujeres y otra cosa es retenerlas. Por ello, debemos también continuar asegurando oportunidades de desarrollo personal y profesional, con un entorno laboral favorable para compartir opiniones, abordando responsabilidades de trabajo en equipo o cumpliendo roles de liderazgo dentro de la empresa. Para profundizar en ello contamos con una Guía de Conciliación para la Vida Laboral y Personal, que considera, por ejemplo, el retorno gradual al trabajo tras el postnatal, facilidades para asistir a eventos escolares y modalidades híbridas para trabajar.
Todas y todos dejamos algo muy importante en nuestro hogar cuando subimos a faena, por eso necesitamos no sólo que cada vez más mujeres quieran ser parte de este desafío, sino que cada vez más hombres quieran ser parte de equipos diversos e inclusivos. Chile y el mundo siguen cambiando, y nuestro espíritu es continuar impulsando la integración de las mujeres como un cambio cultural que nos ayuda a avanzar hacia una minería moderna, inclusiva y sustentable para aportar a nuestro compromiso de desarrollar minería para un futuro mejor.
