El gobernador regional, Ricardo Díaz, manifestó que cuando la ministra del Interior Carolina Tohá estuvo en Antofagasta, expresó cuestionamientos hacia el trabajo atrasado que presentan varias seremis en materia de gasto presupuestario. “En algún momento se habló la posibilidad de cambios y creo que el gobierno a nivel central tiene que tomar decisiones, porque a ocho meses, quizás esta baja evaluación del presidente tiene que ver también con el desapego territorial que muchos de los servicios muestran”, declaró.
En entrevista con “El resto es música”, programa de Timeline.cl en Radio Sol, el gobernador habló sobre las críticas que ha recibido por la baja ejecución del presupuesto regional, explicando las diferencias entre las gestiones que realizaban los intendentes designados por Santiago y la tarea que está desarrollando para la zona. En este sentido apuntó a las responsabilidades de los municipios y quienes dirigen los servicios en Antofagasta.
Díaz señaló que, en el peor de los casos, el 2022 terminará con un 86% del gasto del presupuesto y aseguró que “cuando dije que no me critiquen por el gasto porque yo no lo ejecuto, bueno, este año que viene los gobiernos regionales podrán ejecutar. Esto marca un escenario distinto, claro que no podrá haber excusas porque revisaremos qué municipio no está gastando y esos proyectos los podremos hacer nosotros”.
- En el Consejo Regional declaró que no se le puede responsabilizar por la baja ejecución del presupuesto, ya que, a diferencia de la figura del intendente, no tiene control sobre las seremis. ¿Puede explicar el tema?
Los gobernadores para ser electos presentamos a la ciudadanía un programa de gobierno, que está en la página web goreantofagasta.cl. En ese programa aparecen una serie de iniciativas, que fue la promesa que hicimos a la ciudadanía, que por supuesto tienen un valor y se supone que tenemos que ser capaces de generar inversión, no gasto. Y digo inversión porque tenemos que cumplir lo que está en ese programa de gobierno, que mejora la calidad de vida. Cómo no será una inversión poner agua potable para las comunidades de Alto Loa o las caletas del borde costero de toda la región o, empezar a construir el hospital que hace mucho tiempo el gobierno del señor Tillería (consejero UDI) ofreció a San Pedro de Atacama y que no se había cumplido. Todo eso está en nuestro plan de gobierno y hacia allá apuntamos la inversión, no soy de la idea de gastar por gastar, como ocurría antes. Porque los intendentes tenían que seguir las órdenes del plan de gobierno a nivel nacional y esto significaba que, con recursos de la región, ellos apalancaban el inicio de proyectos mandatados desde el nivel nacional.
Eran transferencias de dinero del Gobierno Regional a distintos servicios y los gobiernos tenían 100% de ejecución presupuestaria, pero cuando uno mira la región, no ve el gran teatro que tiene el Biobío, la infraestructura que tienen otras regiones o por último, esa maravilla que es Humberstone en Iquique y que podríamos replicar con Chacabuco. Nosotros perdimos por muchos años la capacidad de hacer inversión y estoy apostando a que podamos hacer obras que perduren y mejoren la calidad de vida. Un ejemplo concreto, esa semana se terminó de licitar la planta de agua de San Pedro de Atacama, nuestra joya turística no tenía agua potable con resolución sanitaria y tiene escases hídrica porque la planta no estaba habilitada para la gran cantidad de turistas.
- ¿Cuál es la proyección de presupuesto que alcanzarán a gastar este año?
Estimo que bordearemos el 86% en el peor de los casos. Una cosa que hemos hecho y me siento muy responsable porque ayudé a formar esta asociación de gobernadores, es que fuimos cambiando las reglas del escenario. Antes, cuando los intendentes no gastaban el presupuesto, tenían que devolver ese dinero. El primer año, cuando me tocó coordinar a los gobernadores y negociamos en el Senado, en la ley de presupuesto 2022 negociamos el saldo inicial de caja, lo que no se invierta, este 14% restante, no se devuelve a Santiago, queda en la región. Estamos haciendo la solicitud para contar con esos recursos en enero, porque tenemos varias iniciativas que comenzarán el 2023. Cuando dije que no me critiquen por el gasto porque yo no lo ejecuto, bueno, en este año que viene los gobiernos regionales podrán ejecutar gasto. Esto marca un escenario distinto, claro que no podrá haber excusas porque revisaremos qué municipio no está gastando y esos proyectos los podremos hacer nosotros.
- ¿Está considerado aumentar la dotación para esa área?
Claro, hemos logrado aumentar la dotación, pero tiene que ser con una mirada distinta, los gobiernos regionales deben que dejar de ser instancias eminentemente administradoras, tienen que ser instancias ejecutoras, diseñadoras de proyectos. Lo que necesitamos son perfiles más del área de la construcción, del diseño, arquitectura, para prospectar diseños. Si te fijas en la región hay una escases de proyectos y el sector público los necesita. Por eso es que cuando invito a las empresas mineras a esta Estrategia Regional Minera, no quiero generar un listado de proyectos para que los financien, sino que nos den capacidad, que los equipos técnicos que tienen ellos los pongan a los servicios de los municipios, para que tengan una cartera de proyectos para financiarlos. Eso lo hicimos con Codelco, está trabajando en el diseño del agua potable de todo el sector de Alto Loa y nosotros después pagaremos esa agua potable rural.
- Un elemento es la falta de proyectos, pero hay recursos que ya se transfirieron y no se ejecutan, que es la crítica hacia las unidades técnicas de ciertas áreas. ¿Qué pasa pasando con estos casos?
Lo que falta es el sentido de accountability (responsabilidad) de todos los servicios, de todas las unidades que tienen un poder de ejecución. Cuando hablo de esto es que todos los representantes, todos los que dirigen, los seremis, tienen que ser capaces de rendir cuenta a la ciudadanía de lo que se está haciendo. Lo que he visto, desde que incluso era consejero regional, es que el Estado tiene un diseño y avanza lentamente en él sin considerar si sirve o no. Por ejemplo, hace diez años se definió que La Chimba era el sector donde se construirían casas. Con el basural al lado en aquel momento se dijo que resolverían ese tema y esto todavía no se concreta. ¿Vamos a seguir construyendo viviendas al lado del basural, con toda la gente que tenemos molesta? Es ahí donde falta ese elemento, las autoridades tienen que escuchar a la ciudadanía, ser capaces de rendir cuenta. Vengo de un movimiento ciudadano, no voy a estar cuestionando a los camioneros si quieren hacer protesta o a los comerciantes del centro si quieren manifestarse por la falta de seguridad, pero tenemos que lograr que esa escucha sea permanente, de tal manera que los proyectos se orienten a las necesidades de la ciudadanía.
Por eso estamos publicando y siendo transparentes, el MOP en este momento lleva un 50% de ejecución de gasto. Los grandes proyectos que el año pasado el MOP me dijo que realizaría, el Teatro Pedro de la Barra, el cuartel de la PDI en Tocopilla, son iniciativas que licitaron a una empresa que a los meses se manifestó en banca rota y que tiene esos proyectos frenados. Cuestiono a la unidad de arquitectura del MOP, cómo es posible hacer la licitación sin prever esa circunstancia. La Dirección de Obras Portuarias, tenemos un convenio de programación con 0% de ejecución de gasto, cuando hablamos de habilitación de espacios para las caletas. ¿A este gobierno le interesa tener buenas relaciones con los pescadores?
Con la DOH y su nueva directora estamos trabajando mejor, resolviendo los temas en Paposo, pero antes era un lío lograr la ejecución de convenios. Con la planta de San Pedro tuvimos hartos problemas el año pasado por el manejo de la DOH. Cuando miras que existe un desapego de la autoridad superior del servicio con la ciudadanía es porque claramente pareciera que lo importante es gastar plata más que dar respuestas a la comunidad. Concuerdo con la crítica, si la plata no se ve al servicio de la ciudadanía, no sirve de mucho salir con el cartel del 100% de ejecución de gasto.
- ¿Este tema lo ha conversado con la Delegación Presidencial que tiene el rol de coordinación con el gabinete regional?
Cuando estuvo la ministra del Interior (Carolina Tohá) le hice ver varios cuestionamientos a distintas seremis que sentía estaban atrasadas. En algún momento se habló la posibilidad de cambios y creo que el gobierno a nivel central tiene que tomar decisiones, porque a ocho meses, quizás esta baja evaluación del presidente tiene que ver también con el desapego territorial que muchos de los servicios muestran con los territorios. Hablemos en positivo, soy profesor, veo bien desarrollada a la seremi de Transportes (Romina Vera), tenemos un plan, el próximo entramos con la electromovilidad, un corredor de buses, estamos invirtiendo en mejoras para taxis eléctricos, conversamos sobre la movilidad urbana sostenible. A ella la veo muy empoderada, estamos con la seremi de Energía (Dafne Pino), vamos a instalar paneles solares en las casas y tenemos varias ejecuciones. Con el seremi de Vivienda (Carlos Contreras) y el plan de emergencia habitacional, lo estamos apoyando con compras de terreno, lo he visto vinculado con los campamentos y los comités de allegados y tiene la exigencia de cumplir. Al menos a estos tres seremis los he visto empoderados en terreno trabajando, pero los necesitamos todos, uno no ve desplegados a los demás y a veces hacen muchas cosas, pero se comunica muy mal. A los otros seremis hay que ponerles el sentido de urgencia, que lleguen con obras, porque la evaluación del presidente depende en gran medida de cómo ellos se vinculan con los territorios.
- ¿Cuál es la mirada respecto de los municipios? ¿Es tan difícil levantar un proyecto?
No están difícil, lo que pasa es que muchas veces falta capacidad técnica. Haría distinciones con los municipios porque algunos no tienen mucha capacidad de equipos, estoy pensando en Sierra Gorda, San Pedro, María Elena, Tocopilla, que tienen dotaciones más pequeñas y les falta apoyo técnico. Lo que hemos hecho es que con parte del presupuesto de funcionamiento del Gobierno Regional contratamos algunas asesorías para apoyarlos en proyectos emblemáticos. En Tocopilla estamos trabajando en la conservación de algunas escuelas y liceos, en Sierra Gorda en cómo apoyar temas de salud o el agua en San Pedro que lo hemos trabajado nosotros con mucho apoyo y tensionando a la DOH.
Hay otros municipios que son más grandes, que tienen una gran cantidad de equipo y de capacidad. Con ellos no creo que pueda existir esta excusa de falta de personal técnico. Cuando hemos priorizado proyectos y finalmente por decisiones de los municipios de a quiénes adjudica y estas iniciativas se judicializan, ahí terminan con un gran colchón de dinero detenido. Hay más de 20 mil millones de pesos en proyectos, como el vivero o el cementerio en Antofagasta.
- ¿En qué está el vivero municipal? Está abandonado desde la época de Karen Rojo.
Entiendo que tienen un problema de adjudicación con la empresa que después intentaron sacarla y se judicializó todo. Esto también tiene que ver con las visiones que tengan los alcaldes y lamentablemente todavía no tengo clara cuál es la visión que se quiere imponer en Antofagasta. Nadie sabe o comprende cuál es el sueño de ciudad, salvo el gran proyecto de parque acuático, nos dicen que se quiere que la perla brille, pero cómo en términos de grandes obras. Cuando hay voluntad política de destrabar un proyecto estas cosas se agilizan, cuando hay un alguien que quiera un verdadero vivero pondría más equipo de abogados y trataría de tensionar la situación para apoyar. Aquí pareciera que se hace un proyecto, se judicializa y que lo vean los abogados sin poner mayor prisa. Las autoridades tenemos que gestionar, estamos disponibles a apoyar y de hecho tenemos presupuesto para contratar asesorías técnicas para los municipios. Pero eso significa una disposición de trabajar en conjunto, al alcalde de Antofagasta le encanta decir que está solo, por las redes decir que nadie lo ayuda, pero aquí hay disposición de ayuda. Lo que tiene que hacer es venir con su equipo y empecemos a diseñar proyectos, menos redes y más trabajo.
- ¿Qué facultades tendrá el Gobierno Regional el próximo año frente a proyectos que no están avanzando?
Lo que tenemos que hacer es tomar algunos proyectos emblemáticos que por mucho tiempo están detenidos y lograr, como seremos unidad ejecutora, tomar el control de esos proyectos y liberar los recursos para ejecutarlos. Hemos visto en las distintas comunas que si logramos mejorar ciertos elementos, podríamos agilizar esta máquina. Por un lado, vamos a continuar con estas asesorías con aquellos municipios que quieran trabajar con nosotros, para ofrecer los servicios técnicos de manera que diseñen los proyectos y los puedan controlar. En el caso donde sea necesario vamos a cambiar las unidades técnicas para agilizar los proyectos y la advertencia para todos es esa, el capítulo de gobiernos regionales ya está aprobado por el Senado y la Cámara de Diputados, nosotros vamos a tener capacidad técnica de ejecutar proyectos. Todos los servicios y municipios están avisados, aquellos proyectos que son de relevancia para la comunidad y que están detenidos por años, vamos a tomar las unidades técnicas para ver cómo ejecutarlos. Sin duda que no podemos tomar todo, pero sí pondremos el foco en algunos elementos en los que si intervenimos podemos agilizar las licitaciones y construcciones, lo vamos a realizar.
- ¿Cuáles sería algunos de esos proyectos que debería tomar el Gobierno Regional?
Cuando asumo como gobernador en Paposo las fosas sépticas estaban todas colapsadas y nos demoramos seis meses en destrabar ese tema para limpiarlas. Eso me interesaría resolver, el tema del alcantarillado en Paposo. Hay algunas obras deportivas, canchas que han estado detenidas por mucho tiempo en distintas comunas, lo que también me interesa, porque a través del deporte mi visión es educar a los más jóvenes y es un elemento de protección que permite bajar las cifras de delincuencia desde una mirada protectora y no punitiva. El agua potable rural me interesa priorizarlo, en las caletas de Tocopilla, Taltal y Alto Loa. En Calama tengo mucha cercanía con el alcalde, hemos trabajado bien y tenemos una visión en conjunto de cómo mejorar las luminarias para evitar las zonas de mayor delincuencia. Tiene que ver con cómo garantizamos obras de confianza para que la ciudadanía vea que sí estamos resolviendo los problemas que le preocupan.
- Se había planteado una instancia público-privada precisamente par desarrollar proyectos. Pasado el tiempo, ¿Qué evaluación tiene del Creo Antofagasta, cumplió su rol?
El Creo funciona muy bien cuando desde lo público logras plantear una planificación específica que apunte a mejoras para la comunidad. Cuando asumo propongo al Creo la posibilidad de que intervengamos el sector de la Bonilla, donde hubo mayor violencia durante el estallido social, donde todos los servicios pudieran entrar y aumentar la inversión pública en ese lugar. Esto ha funcionado bastante bien, hay un plan que se llama “Unión por Bonilla”, en el que estamos con Serviu, Fosis, Sercotec, las universidades Católica del Norte, Antofagasta y Santo Tomás, además de organizaciones como Techo y, junto al Creo coordinamos esa inversión. Estamos generando varios proyectos, un sector de pintura de fachadas, buscamos con Aguas Antofagasta potabilizar con un diseño de alcantarillado para evitar que se aglomeren las aguas servidas. Hemos generado un impacto y el municipio también nos ha acompañado a través de Secoplan. Entonces cuando te tomas la gobernanza del Creo y planteas un proyecto ellos pueden acompañar y ayudar muy bien. El Creo es una excelente oportunidad para cualquier autoridad que tenga una visión distinta.
- En ese sentido, ¿debe volver Calama Plus y en qué condiciones, considerando que Codelco dejó su participación?
Mi mirada es bastante crítica de Calama Plus. Codelco iba a trabajar con la comunidad e hicieron toda una encuesta y un listado de supermercado de todos los proyectos que querían para Calama. Pero después fueron incapaces de hacer los diseños, las prospecciones para que esos proyectos flotaran y ahí es cuando Clama Plus comienza a hundirse. Si no están las capacidades técnicas para el diseño de proyectos, es difícil que pidiendo plata se resuelvan las cosas. Esta región tiene mucho dinero y lo que faltan son gestores. Por eso mi mirada es distinta, cuando tuve las primeras reuniones con Codelco dije miren, todas las resoluciones de calificación ambiental son estas, ustedes le deben a la región 8.600 millones de pesos por todos los incumplimientos y los puedo denunciar en la Superintendencia de Medio Ambiente. Entonces trabajemos por la región, comprométanse con una mirada más territorial y ahí diseñé una estrategia regional minera donde están todas las grandes compañías, pero las primeras líneas, ni siquiera los gerentes de medio ambiente con nosotros para una visión de región donde lo que quiero es generar una capacidad de diseño. Sin esa capacidad de nada sirve que coloquen 10.000 millones de pesos.
- ¿Cuáles son las áreas críticas en cuanto a proyectos en la ciudad de Antofagasta? ¿Cómo habría que diseñar la ciudad?
Lo primero es entender que el acalde es quien tiene el rol de ser el gran planificador de la ciudad. Necesita sacar rápidamente el plan regulador, porque todos los sueños de proyectos que podamos tener, si no están dentro de ese plan, no podrán ejecutarse. Es lo que nos pasó con el centro de vacunas que se nos ofreció, estaba todo, pero no se articuló la zona como correspondía en el plan regulador. Primero necesitamos esto, un ordenamiento, una visión de largo aliento que nos haga a todos soñar y eso ha faltado. Soy partidario de generar políticas ciudadanas, que nazcan desde las bases y que den sentido a todo, por esto tengo el Coscoc y una línea de mi programa es la participación ciudadana.
Estoy trabajando con Econsa para que seamos la primera región que reduzca la cantidad de agua que botamos al mar, que exista un real procesamiento. Si el alcalde está dispuesto a acompañarnos en ese sueño, podría regar y tener áreas verdes con agua gris. Si fuera alcalde haría un plan de mejora de establecimientos escolares, pero en términos de articular, que los directores hagan buenos planes de mejoramiento educativo que apunten el foco, por ejemplo, en la lectura. Mejoraría las bibliotecas de los establecimientos, las canchas para generar academias y ofrecer a la juventud instancias de desarrollo más allá de lo que tienen ahora.
- Uno de los desafíos de la región es el corredor bioceánico, que permitirá la salida de carga de otros países por Antofagasta, pero además tratará de incorporar parte del proceso productivo en esta zona.
Hace poco publiqué una foto de un tren que me regalaron y puse soñemos. Qué manera de insultarme en Twitter, tanta rabia, “gobernador hay tantos problemas de delincuencia y no hace nada”. La verdad es que estoy preocupado de la delincuencia, el Gobierno Regional y el Consejo Regional han financiado más de 19 millones de pesos, hemos transferido plata directa a Carabineros, 1.700 millones de pesos para que hagan todos estos operativos que estamos viendo. He estado con la gente del centro en estos operativos y hoy el centro está ordenado gracias a la gestión nuestra, porque no tenemos las carpas que teníamos el año pasado.
Que uno quiera soñar no significa que no nos ocupemos de las cosas que tenemos ahora. Quiero ser claro, si estamos solamente resolviendo los problemas de ahora nos estamos perdiendo una tremenda oportunidad para nuestra región en el futuro. Estamos invirtiendo en aquellas cosas que, a usted, vecino y vecina, le den sentido y que viva ese futuro. Habrá paneles fotovoltaicos financiados por nosotros para que las familias paguen menos luz, el próximo año habrá taxis y buses eléctricos, se darán cuenta que podrán cargar el celular mientras van al trabajo o al centro en un viaje sin ruidos. Tendremos agua potable en las distintas comunidades, estamos invirtiendo en cosas reales que ustedes verán.
Ya se está terminando la última etapa de este corredor, el puente entre Brasil y Perú, eso termina el 2024, pero lo que me preocupa es que esos camiones no pasen por nuestras ciudades y nos atochen. Por eso estamos diseñando zonas de descanso fuera de la ciudad, un puerto seco en Calama donde se revise la carga y sea más rápido. Estoy invirtiendo en el puerto porque quiero que la exportación no solo sea de minerales, también de alimentos, porque si logramos esto, podríamos traer carne directo a la región y podríamos nosotros consumirla más barata. Estamos haciendo una serie de inversiones que verán en muy poco tiempo y sentirán que el progreso sí nos pertenece y es más, la Seremi de Bienes Nacionales ya me confirmó que el Cerro Mackenna será del Gobierno Regional y me gustaría que tuviéramos un observatorio como el que tiene La Serena y Coquimbo. Nuestros cielos son más hermosos y por qué no regalarnos un observatorio para que los científicos de las universidades y nuestros niños puedan estudiar Astronomía y tengan ahí donde trabajar.
Esto tenemos que hacer, dejarnos del barro, de la chimuchina y empezar a mirar el potencial de la región. Hemos tenido demasiada mediocridad en la política, demasiado barro, todos culpándose y lo que necesita la gente es certeza, seguridad de que estamos en un momento clave para hacer las mejores inversiones. Somos la única región que está produciendo hidrógeno solar ahora, porque hay una planta del Gobierno Regional y estamos probando para que vengan inversionistas porque es el combustible del futuro.
Encargué un estudio de agregación de valor y existe el potencial de hacer aceite de soja, hamburguesas, jamones, jugo de naranja, todo esto podría salir como producto chileno para ciertos mercados y hay inversionistas paraguayos y brasileños que quieren hacerlo. Tenemos todo para empezar a generar una región distinta. Tenemos una riqueza en nuestra gente y si somos capaces de creer entre nosotros mismos podemos potenciarlo, pero requiere salirse del barro, dejar la mirada mediocre de insultarse por las redes, escribir columnas para sacar el guiño.
- ¿La foto del tren es solo para soñar?
Lo bueno de ser gobernador es que puedo hablar con los ministros y quienes toman grandes decisiones. Hablé con el director nacional de Concesiones porque se está concesionando un tren de carga de Antofagasta, Baquedano, Sierra Gorda a Calama y dije por qué no colocamos un vagón de transporte de pasajeros. Podríamos tensionar eso para una inversión pública privada.
- ¿Y qué le respondieron desde concesiones?
Lo estamos estudiando, haremos una mesa para ver si podemos tener este tema. Lo que pasa es que debemos hacer inversiones, según los expertos, las vías férreas que tenemos no sirven, alcanzan solamente 30 a 40 kilómetros por hora. Y un tema no menor que me explicaban los ingenieros es la pendiente, pero son cosas que ya se han hecho y también voy a conversar con unos inversionistas franceses que vienen con una idea de tren. Para esto hay que lograr la rentabilidad social y eso se da en la medida que logras resolver la mayor cantidad de problemas. Siempre he creído que la mirada de un metro tren en Antofagasta funciona, pero si sumamos el aeropuerto y Mejillones. Tengo sueños grandes, estoy seguro que gran parte de las iniciativas que voy a impulsar no las voy a inaugurar, pero esta región se merece que logremos dejar grandes proyectos y en eso no me pierdo.
