Efectivos de Brigada de Delitos Sexuales de la PDI incautaron esta semana la investigación previa canónica realizada por la abogada María Elena Santibañez -por orden de los propios jesuitas- en contra del sacerdote Felipe Berríos, luego de allanar, con orden judicial en mano, las oficinas centrales de la Compañía de Jesús.
La congregación negó en reiteradas oportunidades entregar los antecedentes al Ministerio Público, basándose en el secreto de la vía canónica, según consignó La Tercera. Este hecho también respondía a la solicitud realizada a la Fiscalía por el abogado defensor de Berríos, Julián López.
Así, la autorización para poder pesquisar el denominado “Informe Berríos” -que otorgó “verosimilitud” a algunas de las denuncias- la pudo obtener la fiscal Yazmín Salech, quien es experta en perseguir delitos sexuales.