En los andares por la vida magisterial y los caminos Educacionales no andados y; aun sabiendo que sembrar y hacer crecer vida en el desierto es toda una hazaña; más en mi constante e interminable inquietud pedagógica para Investigar, Innovar y Emprender en educación, conocí la Hoja de Ruta de la Educación para el Desarrollo Sostenible de los Pueblos hacia el año 2030, en que la UNESCO proporciona orientación a los países para que la educación promueva procesos educativos relevantes y pertinentes de los saberes para el desarrollo de Capacidades, Actitudes y Valores, desde la Autonomía y la Libertad para que los estudiantes descubran los Aprendizajes, asociados a las problemáticas del actual Modelo de Desarrollo Humano y su transición a la Sustentabilidad.
Afortunadamente, ello acrecienta la propuesta de que la Educación debe ser un proceso que interprete a quienes educa; por ello, si el hombre y la mujer, desde la Educación, no pueden ser felices si no acceden a sus Aprendizajes desde la plenitud de su Libertad; por ello, parece lógico que el Liderazgo Educativo Pedagógico, sea ejercido desde la promoción de la Libertad , Autonomía y Participación para que todos los actores de la Organización , sean Directivos, Docentes, Asistentes y, fundamentalmente LOS ESTUDIANTES, logren sus Aprendizajes.
A propósito de este contexto libertario y su aplicación a la Vida y a la Educación, hoy recuerdo a varios Líderes, que han soñado la Libertad en distintos escenarios y visiones sociales, filosóficas y políticas; entre ellos, por ejemplo, a Don Nelson Mandela, férreo defensor de la Libertad de todas las personas del mundo que, en sus Pensamientos señala:
“He anhelado el ideal de una sociedad libre y democrática en que todas las personas vivan juntas y con igualdad de oportunidades; porque, la pobreza no es natural, sino creada por el hombre y; por ello, erradicar esa pobreza, no es un acto de caridad, sino un acto de justicia humana y la protección de un derecho humano fundamental” y, luego agrega: “Dejad que la Libertad reine; puesto que, el sol, nunca se pone sobre tan glorioso logro humano y; sin olvidar nunca que el propósito de la libertad es crearla para otros”; dicho de otro modo, el Educador debe regalar sus propias alas para el vuelo de sus estudiantes.
Así también, otro autor, el Escritor peruano y Premio Nóbel de Literatura 2010 y hoy miembro de la Academia Francesa, Don Mario Vargas Llosa, y aplicando los principios de la diversidad para escuchar a todos, desde otra trinchera del pensamiento muy diferente a Mandela, dijo “Nadie está a salvo, si no somos todos Libres” y agregó: “La Vida debe ser como la de los Libros: Libertad plena en todo y para todos”.
Del mismo modo, el escritor brasilero, don Paulo Freire , cuando escribe sobre la Pedagogía de la Esperanza que supere al Opresión en Educación, como única forma real de Transformación Social o, cuando, dicho Autor, le recuerda a los Docentes que “No olviden que al frente, su estudiante, no es alguien a quien debe someter; ni tampoco debemos olvidar que en la vida y en educación, nadie conoce todo, ni nadie lo desconoce todo y que, por ello, nadie educa a nadie, ni nadie se educa a sí mismo, sino que hombres y mujeres se educan entre sí y en libertad, mediatizados por el mundo”.
Por ello entonces, en esa búsqueda consensuada de la Libertad de la Gestión y la Docencia, cada Maestro desde su convicción que: “La Educación es el arma más poderosa para cambiar el Mundo” ; debe defender el principio de Libertad en la Vida, en todas sus dimensiones, sea política, social y, obviamente, desde la Educación” ; es decir, sea desde la Praxis y la Investigación en Docencia en los distintos niveles de nuestro Sistema Educativo y, en particular, sobre Gestión y Liderazgo Escolar, debe entender que, más allá de las variadas, innovadoras y muy fundamentadas Didácticas existentes, y junto a la Pedagogía del Amor y la Esperanza en Educación; debe promover del Valor de la LIBERTAD, para descubrir los Aprendizajes con Autonomía, Creatividad, Participación y no ser una caja repetidora de los conceptos que tantas veces no se entienden; puesto que, aplicando dicha Libertad Pedagógica, permitirá descubrir los misterios y laberintos para avanzar hacia una Educación Integral Inclusiva.
Así también, en ese afán libertario, no anárquico; sino que, como Acto Poético y Justicia Humana de Educar, PARA QUE TODOS Y TODAS APRENDAN, cada Maestro debe entender que, es imperativo promover la Libertad y la Justicia Social en los Aprendizajes, como “Ejercicio irrenunciable en la belleza de la unicidad y del ser distintos unos de otros”; pero, lamentablemente, este principio fundamental, que parece obvio, tantas veces se olvida en nuestra sociedad y ello, se refleja en nuestra Educación que intenta mantener el ancestral infierno de lo igual, intentando una equivocada mismidad, sin autenticidad que, prácticamente, formatea el pensamiento de nuestros Estudiantes, como un verdadero monstruo burocrático que excluye la lógica democrática olvidando con ello, la originalidad de cada cual y el derecho a ser diferente y ello; nos lleva en muchas ocasiones a colectivos deshumanizantes, competitivos, consumistas, sin sana convivencia; incluso, muchas veces decimos estar en red; pero, en la realidad no nos escuchamos los unos a los otros sino que , como en la Torre de Babel, sólo hacemos ruido colectivo, sin entendernos.
Por ello, mi invitación es que cada Maestro, Educador Social Integral, debe practicar la Pedagogía en la defensa de esa Libertad para ser diferentes y, a propósito de LIBERTAD, también debemos cautelar es que en nuestra modernización que, valora a la Tecnología y el Poderoso Mundo Virtual como una excelente herramienta de apoyo complementario educativo y para la mejora de nuestras vidas; pero, que ésta no reemplaza a la interacción humana; ni debe quedar en mentes y manos equivocadas cuyo uso, podría causar eventos catastróficos, violencia, ciber-bullyng, etc. Es decir, claramente debemos evitar que esta herramienta se convierta en una dictadura digital y de auto explotación que nos someta sin descanso; que nos aprisione y limite la libertad individual y colectiva; es decir, como dijo el Filósofo Sur Coreano Byung-Chun Han: “Nos estamos transformando en carceleros de nuestra propia prisión digital que, nos obliga a cumplir las formas estereotipadas”; puesto que, sometiéndonos a las Tic’s, es probable que con este enjambre digital dejemos de ser nosotros mismos para ser controlados brutal y psíquicamente abandonando la Libertad del Pensamiento, de la Filosofía y de la Espiritualidad y semejando tristes robots tecnológicos, sin capacidad de discernir lo bueno, lo malo u olvidando la ética de nuestras actuaciones personales, educativas y sociales; es decir, desde la opresión digital, podríamos perder la esencia de SER HUMANOS.
Por ello, la respetuosa invitación es a repensar y rediseñar la Educación Pública, sea administrada por Corporaciones, DAEM o Servicios Locales de Educación (SLEP) que cada Proyecto Educativo Institucional (PEI)y los Programas de Mejoramiento Educativo (PME) de las Unidades Educativas, sea enfocado hacia:
¡Un Modelo Educacional de Desarrollo en LIBERTAD, desde la Justicia Social de los Aprendizajes en Inclusión para todas y todos los Estudiantes, según su particular dimensión y desde la belleza de su propia unicidad; porque así, cada niño y niña que se cobija bajo nuestro cielo, podrá latir en su más legítima dimensión de dignidad humana hacia la FELICIDAD Personal, Social y Comunitaria!
Concuerdo plenamente con usted don Jorge respecto a la Pedagogía en la defensa de la libertad, para que de este modo, la Educación promueva los procesos educativos desde la autonomía y la libertad para que cada persona pueda lograr sus aprendizajes con igualdad de oportunidades