Investigación y desarrollo temprano de nuevas vacunas, desde sus etapas iniciales hasta el producto final listo para ser industrializado, es la tarea que la empresa china Sinovac realizará en Antofagasta y que podría resultar clave para enfrentar la actual pandemia de SARS-CoV-2, así como la amenaza de otros agentes patógenos.
La farmacéutica ya solicitó el comodato del terreno de 18 mil metros cuadrados que el Ministerio de Bienes Nacionales puso a su disposición en el sector norte de la ciudad y, según se proyecta, en los próximos meses debiera enviar a la zona a técnicos para evaluar detalles de la obra.
Con esto, mientras en la Región Metropolitana se realizará el llenado y etiquetado de vacunas en base a los ingredientes activos desarrollados anteriormente en China (planta Fill and Finish), en Antofagasta Sinovac piensa instalar una planta con equipos científicos y tecnología para idear los productos del futuro.
“Lo planteado por Sinovac a la fecha es instalar una planta de desarrollo I+D+I en el terreno visitado en el mes de julio. Desde esta planta se dará énfasis a las etapas más iniciales en la producción de vacunas, como es la investigación, descubrimiento y el desarrollo de nuevas formulaciones. Ejemplo de aquello podría ser la generación de vacunas para las nuevas variantes de Covid-19 predominantes en Chile”, destaca el doctor Alexis Kalergis, director del Instituto Milenio de Inmunología e Inmunoterapia de la PUC.
PLANTA API
La planta en Antofagasta sería lo que técnicamente se conoce como planta API, pues lo que busca desarrollar es el “Active Pharmaceutical Ingredient” (el ingrediente farmacéutico activo) que se emplea luego para la producción a gran escala de las vacunas en las plantas Fill and Finish.
Kalergis explica que una planta como la que se proyecta es un tremendo avance, pues además de producir nuevos productos, permitirá ir ajustando las formulaciones de vacunas a las cepas y variantes de virus circulantes en nuestro país y en Latinoamérica, de manera que la inmunidad de la población sea más específica y efectiva.
“Es una gran noticia que podamos retomar la manufactura de vacunas de forma local (…) Este proyecto de red de plantas no sólo generará dosis de vacunas para Chile sino que también para otros países que lo requieran en otros continentes. Sumado a ello, se generarán nuevos empleos en las distintas áreas del proceso productivo de esta planta, siendo además un aporte a la descentralización”, recalca.
COLABORACIÓN
Junto al desarrollo de la planta Sinovac, la Universidad de Antofagasta trabaja en la creación del Centro de Investigación en Inmunología y Biotecnología Biomédica (CIIBBA), en alianza con el Gobierno Regional, la PUC y el Instituto Milenio.
Este centro se emplazará en el Campus Coloso y agrupará una decena de investigadores locales y nacionales de las áreas de la inmunología, virología, microbiología, parasitología y biotecnología con aplicaciones en la biomedicina.
Alexis Kalergis explica que la colaboración científica entre el CIIBBA y Sinovac abrirá la puerta a una relación muy fecunda para el país.
“Esperamos que gracias a una posible colaboración científica desde la academia en el CIIBBA y la planta Sinovac, se pueda desarrollar un polo científico-clínicoacadémico-público-privado muy relevante en temas de investigación, desarrollo y manufactura de vacunas. Esto es posible gracias a la calidad de las colaboraciones existentes entre las universidades Católica, De Antofagasta y De Chile, así como la larga experiencia que estas casas de estudio tienen en la formación de científicas y científicos profesionales, la cual será un gran complemento a la especialidad productiva y de transferencia de conocimiento que tiene Sinovac”, dijo.
El diputado José Miguel Castro, quien ha impulsado los acuerdos que permitieron la llegada de Sinovac a Antofagasta, anticipa un próspero escenario para la ciencia local gracias a la convivencia de dos centros de investigación de alto nivel.
“Aquí habrá una potenciación importante, un traspaso inmediato y directo, no virtual, de parte de los profesores, de los investigadores, de la academia, que va nutrir esta planta de Sinovac. Es por eso que Sinovac se instala en Antofagasta. Yo proyecto un Silicon Valley no sólo en términos de vacunas, sino que también de otros medicamentos”, señaló.
En concordancia, Heriberto García, director (s) del ISP, manifestó que ambos centros se potenciarán de manera muy importante y revitalizarán una actividad que en Chile estaba “dormida”.
“Se irá generando un capital humano muy interesante en investigación y en esto como ISP queremos ser parte, porque nos conviene como país desarrollar el ambiente académico, científico, de inversión privada en ciencia y nuestro ambiente científico público en el campo de las vacunas”, subrayó.
Según los plazos entregados por el diputado Castro, la planta Sinovac en Antofagasta podría estar operando a fines del próximo año, entendiendo que la Fill and Finish de la Región Metropolitana debiera comenzar a producir vacunas el primer trimestre de 2022.