“Una vez que conocen a un comunista hay un cambio de opinión en la gente”: presidenta regional del PC y el anticomunismo en la pasada elección

Tras el último congreso del Partido Comunista (PC) en el que establecieron la hoja de ruta para los próximos cuatros años, el conglomerado oficialista eligió a su nueva directiva regional, la que ahora encabeza la militante Luz Moore Pastén. La ingeniera civil química asumió la conducción del partido que en marzo comenzará las conversaciones para el desafío parlamentario del 2025, aunque explicó que por el momento todavía no hay ninguna definición sobre eventuales nombres para llevar a la papeleta. Y tras la elección regional y municipal de octubre, la dirigente valoró el crecimiento en votación, lo que atribuyen a un trabajo que dio frutos y que les permitió llegar a nuevos espacios.

Moore también habló sobre el anticomunismo que vieron durante la pasada campaña, una situación que “siempre ha estado, somos un partido que pasó por una ley maldita y fue perseguido en la dictadura, algo que siempre estará latente”. La presidenta regional del PC relató que en ese proceso se encontraron con personas reticentes a recibir sus propuestas.

“Pero en alguna instancia lográbamos entrar a esos espacios y siempre nos sucedía que una vez que conocían al candidato, hablábamos de nuestro programa, cambiaban de opinión. Fue un desafío a nivel mediático, porque el anticomunismo se maneja a nivel de medios, de redes sociales, pero cuando estamos en el territorio y conocen a los comunistas cambia la mirada”, manifestó.

Sobre la orgánica del PC, la antofagastina y titulada en la Universidad Católica del Norte sostuvo que en el contexto de los congresos que cada cuatro años realiza el partido a nivel comunal y regional se elige la directiva en una votación interna. Este proceso ya se hizo en todas las comunas de la región, instancia en que las células del partido discuten cuál será la proyección política y orgánica. “Esta discusión interna es muy enriquecedora y se zanjan los lineamientos para los próximos cuatro años, que es lo más importante, se plantean todos los puntos de vista, las críticas y sobre todo los aportes. La semana pasada se hizo la elección y fui electa presidenta regional del partido en una directiva que integran Javier Candia, Ana Hun, Víctor Guzmán y José Mardones”, declaró Moore.

En dicho congreso regional, agregó, hicieron un análisis poselecciones y sobre cuál será el trabajo en el periodo que queda como parte del gobierno, además de la lectura de las necesidades de los vecinos y vecinas de cada comuna y cómo el partido se posiciona frente a ellas.

• ¿Cuál es la evaluación del partido respecto de lo que ocurrió con la alcaldía de Antofagasta, la apuesta más importante que tuvieron en la pasada elección en esta zona?

La elección de la Municipalidad de Antofagasta fue una gran apuesta para el partido a nivel regional y nacional. Si bien no se logró el objetivo que era ganar, sí obtuvimos una gran cantidad de votos, el 19%, 41.000 sufragios y eso posiciona a Pablo Iriarte y al partido de modo muy positivo. Lo vemos desde ese punto de vista y también de todo este trabajo que se realizó, que no fue solamente durante el periodo de campaña, sino que viene desde más atrás. Logramos posicionar a nuestro candidato, llegando a espacios donde antes no estábamos y eso no lo queremos perder.

• ¿A qué nuevos espacios llegaron en esta elección?

Por ejemplo, grupos de emprendedores, que era un espacio en el que como partido antes no llegábamos, porque generalmente es asiduo a otro sector. También juntas de vecino a nivel territorial, en el sector norte, sobre todo, donde nunca habíamos llegado y ahora estamos ahí y no queremos perder el territorio. Siempre seremos un partido que, independiente que esté en el gobierno, tendrá los pies bien puestos en la calle.

• ¿Por qué no lograron captar el voto de izquierda que el gobernador sí obtuvo en la comuna de Antofagasta para la alcaldía?

El análisis de los votos es una suma de factores que responden a una revisión que será más a largo plazo. Tal vez pudo pesar un poco el hecho de ser oficialismo, pero no podemos concluir todavía. Hubo territorios a los que sí llegamos y el gobernador no y viceversa, por ejemplo, en el sector sur, donde él tuvo mayoría de votos y nosotros no. Hay un fuerte factor de anticomunismo también y eso lo reconocemos, leemos el periodo del tal forma, sin embargo, no es un análisis que tenemos cerrado, sino más bien a largo plazo.

• ¿Cómo vieron ese anticomunismo durante la campaña?

Nos pasó mucho con todos nuestros candidatos de que había gente muy reticente a recibir nuestras propuestas y a abrirnos la puerta. Pero en alguna instancia lográbamos entrar a esos espacios y siempre nos sucedía que una vez que conocían al candidato, hablábamos de nuestro programa, cambiaban de opinión. Fue un desafío a nivel mediático, porque el anticomunismo se maneja a nivel de medios, de redes sociales, pero cuando estamos en el territorio y conocen a los comunistas cambia la mirada. También eso lo leemos en la reelección de los candidatos PC como Waldo Valderrama o Víctor Guzmán que aumentaron significativamente su votación. Todo esto nos deja como conclusión que una vez que conocen a un comunista hay un cambio de opinión en la gente, tanto emprendedores, trabajadores y las juntas de vecino.

El anticomunismo siempre ha estado, somos un partido que pasó por una ley maldita y fue perseguido en la dictadura, algo que siempre estará latente. Frente a aquello seguiremos trabajando y con los pies en la calle, lo que no significa necesariamente estar protestando en las marchas, sino que siempre estar con los vecinos y vecinas en la defensa de su bienestar.

• ¿Pero fue algo que les impidiera hacer campaña o más bien se trató de situaciones solapadas?

Creo que no fuimos capaces de gestionar comunicacionalmente este discurso anticomunista. Lo que nos pasaba mucho cuando trabajamos en la campaña de los candidatos es que una vez conocían nuestros programas había un voto favorable. Y eso se demostró hasta con encuestas que mostraban que, si conocían al candidato, el 80% tenía un voto a favor de él. Entonces es un tema mediático que no pudimos sobrellevar.

• ¿Cómo proyectan las elecciones del próximo año, Pablo Iriarte debería ser un candidato natural?

Las pasadas elecciones las vimos de forma positiva, porque también aumentamos el número de concejales. Además, el consejero Víctor Guzmán, el concejal de Antofagasta y el de Mejillones subieron en sus votaciones y esa lectura nos indica que el trabajo tuvo frutos, fue valorado y bien evaluado. También conseguimos un concejal en Calama, y en Tocopilla, donde hace mucho tiempo no teníamos un espacio y como partido a nivel regional estamos llegando a más lugares.

Frente al próximo año no tenemos candidaturas confirmadas, ya que es una decisión personal de Pablo y como partido también necesitamos un análisis de quién será la persona ideal. Es una conversación de largo plazo y que involucra decisiones personales.

• ¿Pero Iriarte sería la prioridad entendiendo la gran cantidad de votos que consiguió?

Claramente Pablo y el partido tienen una oportunidad con los votos obtenidos en la última elección. Lo estamos analizando porque es un objetivo para nosotros llegar al Congreso y es posible, pero la decisión de Pablo Iriarte es personal y es una conversación que tendremos con él en su momento.

• ¿Hay alguna fecha o plazo para estas definiciones?

No hay fechas establecidas, pero en marzo comenzaremos a analizar los escenarios, porque queremos que nuestro compañero descanse, fue más de un año de trabajo de campaña. Como partido no queremos perder los espacios a los que llegamos, no vamos a replegarnos, sino que seguiremos trabajando.

• ¿Cómo ven el escenario para el candidato o candidata del partido al considerar que la votación de Iriarte fue un apoyo de todo el oficialismo, respaldo que en la parlamentaria se dividirá entre el resto de los partidos de gobierno?

Estamos en un escenario en el que dividir fuerza no será favorable para nosotros. Debemos seguir manteniendo la unión de nuestro sector, tiene que ser el tópico desde la DC al PC nuevamente y es una conversación que se llevará a nivel central. En el caso de las divisiones, eso siempre se dará y no creo que nos juegue en contra, porque seguimos trabajando en los lugares donde estamos instalados, ya sea desde las concejalías, el Consejo Regional, pero también en los espacios territoriales y con los trabajadores y trabajadoras donde tenemos presencia.

• ¿Deberían repetir ese acuerdo que lograron para un candidato único en la municipal?

Creo que esa receta puede funcionar nuevamente, es una opción que nos puede llevar a resultados favorables, sobre todo leyendo el escenario en el que la ultraderecha está creciendo en la región.

• ¿Fue un error entregar, tácitamente, ciertos temas a la derecha, como la seguridad, el desarrollo económico y la inversión?

En el congreso hablamos mucho de las necesidades de las personas y la seguridad es un tema muy importantes a nivel regional y a nivel nacional, sobre todo en las comunas críticas como Calama o Antofagasta. Es un tema del que se ha apropiado la derecha en términos de discurso, pero no es algo en lo que no estemos y no tengamos propuestas. Siempre vamos por la seguridad, también la social y eso siempre ha estado en agenda en los programas, como también lo está en la agenda del presidente Gabriel Boric.

Respecto a las inversiones como partido tenemos una visión económica y una postura sobre el desarrollo económico del país. Creemos en la importancia de avanzar en la estrategia del litio para aumentar la matriz productiva para dejar de ser una región extractivista y pasar a producir para trabajar aquí sus minerales. Eso está dentro de nuestros lineamientos y son temas que se conversan en el congreso. También creo que se nos caricaturiza mucho, nos posicionan de forma negativa con algo que siempre defendemos, la dignidad, lo mismo como defensores de los derechos humanos, como si fuera algo negativo. Y es porque siempre hemos mantenido una postura clara con esos temas, en desmedro de dar a conocer nuestra postura con respecto al desarrollo económico del país, algo que también tenemos dentro del desarrollo social.