Implementos de comunicación de alta tecnología, como teléfonos satelitales y antenas portátiles Starlink, fueron algunos de los elementos incautados por personal de Carabineros, durante la detención de una banda dedicada al contrabando de cigarrillos.
Los detenidos, seis en total, cinco bolivianos y un chileno, fueron formalizados por la Fiscalía de Análisis y Criminalidad Compleja de Antofagasta por los delitos de asociación criminal y contrabando aduanero, y quedaron en prisión preventiva por la causal de peligro para la seguridad de la sociedad.
Según se informó durante la audiencia, los detenidos planificaron y llevaron a cabo la internación por un paso no habilitado cercano al sector de Hito Cajón, de un gran cargamento de cigarrillos, compuesto por 1.227 pacas (613.500 cajetillas), cuyo avalúo provisorio es superior a los $1.500 millones.
Para lograr su propósito, distribuyeron sus funciones de tal forma que cuatro de ellos desempeñaron funciones de resguardo y protección de la mercancía a bordo de una camioneta, mientras que los dos restantes estuvieron a cargo del transporte del cargamento ilegal en un tracto camión con semirremolque.
Los primeros en ser detenidos fueron precisamente los ocupantes de la camioneta, quienes fueron fiscalizados por carabineros mientras descendían del sector cordillerano, verificando los funcionarios policiales que portaban elementos habitualmente usados para cometer el delito de contrabando, como radios, binoculares, radio transmisores, antenas de radio Starlink, teléfonos satelitales y baterías para recargar los dispositivos.
Minutos más tarde el personal policial logra la detención del camión con el cargamento de cigarrillos a la altura del kilómetro 78 de la ruta 23 CH.
Diligencias investigativas posteriores permitieron determinar que los imputados llevaban meses planificando el ingreso ilegal e incluso habían creado un grupo de WhatsApp para coordinar los detalles de la operación.
ORGANIZACIÓN
El Fiscal Regional de Antofagasta, Juan Castro Bekios, destacó que se trataba de un grupo altamente organizado y que contaba con sofisticados elementos tecnológicos y recursos para llevar a cabo el ilícito.
“En este caso, la incautación de teléfonos satelitales, antenas para conectividad a través de la red satelital Starlink, radiotransmisores y otros aparatos, confirman que detrás de estos delitos hay organizaciones criminales muy importantes, capaces de montar toda una logística para llevar a cabo sus operaciones”, indicó.
Castro Bekios recordó que el delito de contrabando ha sido identificado por la Fiscalía como uno de los ejes prioritarios de la persecución penal en la región, al igual que el tráfico de drogas, precisamente por ser ambas importantes manifestaciones del crimen organizado.
“Lo relevante es que, en esta región, estamos dando al contrabando de cigarros un tratamiento muy similar al que damos a los narcotraficantes, es decir, no sólo quedarnos en la incautación, sino que considerar a quienes participan en esto como una organización criminal, porque sabemos que eso es lo que nos permite realizar una persecución penal mucho más eficiente para neutralizar a estas bandas”, precisó el persecutor.
Por su parte, el jefe de la Zona Antofagasta de Carabineros, general Cristian Montre Soto, manifestó que este importante resultado obedece, principalmente, a una estrategia operativa contra el crimen organizado desplegada en la Región de Antofagasta, la cual ha permitido resultados históricos cercanos ya a los 4 millones de cajetillas de cigarrillos incautadas en lo que va de este año, lo representa 78% más que en igual periodo de 2024.
Tras la formalización de los seis detenidos, el Juzgado de Garantía de Antofagasta dispuso un plazo de investigación de 100 días, periodo durante el cual se seguirán desarrollando diligencias relacionadas con los hechos.
