Mayores posibilidades de encadenamientos productivos en el hidrógeno verde que en el litio observa el vicepresidente ejecutivo de Corfo, José Miguel Benavente. Los productos asociados tienen gran demanda local y la minería se encuentra entre ellas, por lo que de inmediato se restan los costos de transporte y se añade el factor de las transformación de las empresas. Y en este escenario, la región tiene ventajas reales para desarrollar en las dos áreas al contar con la generación de energía eólica, solar y además con los puertos para exportar la producción.
En marzo, el ingeniero civil industrial y doctor en Economía asumió la vicepresidencia y este lunes y martes estuvo en Antofagasta participando de Exponor y al mismo tiempo reuniéndose con funcionarios de la corporación. Benavente indicó que trabajan rápido en iniciativas para el desarrollo del hidrógeno verde, recurso que representa una oportunidad estratégica para Chile, ya que el país puede transformarse en uno de los principales productores eficientes de un elemento que históricamente se obtenía con la utilización de combustible fósil. Las energías renovables, los puertos y la demanda local dotan a la región de ventajas comparativas únicas, por lo que cuentan con un comité para impulsar una estrategia que involucra al sector público, privado y a las universidades.
Sobre la Empresa Nacional del Litio dijo que se trata de un diseño que contempla la participación de los privados, aunque aquello es tarea del Ministerio de Minería. Destacó el compromiso con las comunidades para ejecutar nuevos proyectos para que reciban beneficios de distintos tipos al estar cerca de las zonas productoras y dijo que la política de apoyo a los emprendedores seguirá siendo la misma, pero añadió que “le estamos poniendo apellido, que tenga una focalización de los temas que sean interesantes para la sociedad”.
- ¿Cuáles son las ventajas reales que tiene Antofagasta en el hidrógeno verde?
Las principales son aquellas derivadas de la generación, el costo de la energía ya sea eólica y solar, nos dan ventaja a nivel mundial. Lo segundo, si uno tiene una estrategia no solo orientada a la demanda local, como la minería para su transformación energética, también en el sector exportador tenemos infraestructura como los puertos. Lo tercero es la experiencia solar, que tuvo cosas buenas y malas, ese aprendizaje institucional nos puede ayudar a enfrentar de mejor manera una estrategia asociada a este nuevo energético.
- ¿Con qué celeridad están trabajando este tema, considerando la experiencia del litio, en que el país demoró en tomar una decisión estratégica?
Muy rápido. Como Corfo recién entrado a la administración nombramos un comité, una institucionalidad bastante flexible que permite coordinar el esfuerzo entre el sector público, sobre todo el anclaje al territorio, si quisiéramos sacar adelante una estrategia en la Segunda Región con el sector privado y universitario para empujar esto. Otra señal es que acabamos de asignar, a través de una licitación que venía de la administración pasada, tres convenios en los cuales apoyamos con pocos recursos, en términos relativos con 50 millones de dólares, pero apalancamos mil millones de dólares para seis proyectos. Los tres primeros se firmaron y ahora lo haremos con los otros tres, para el desarrollo de plantas un poco más grande que las piloto para obtener hidrógeno verde para demanda local. Esas son a lo menos dos señales que hemos hecho en literalmente dos meses.
- Cuando los comunidades no reciben beneficios por los distintos proyectos en sus territorios suele existir una resistencia, algo que Antofagasta conoce. ¿Cómo manejarán ese tema?
Con ellos desde el comienzo, esa es la idea. Los beneficios son de varios tipos, uno es cuando se opera en un ambiente más limpio, lo que ayuda a todos y por eso estamos descarbonizando. Lo segundo son los procesos productivos por los cuales logras esto, que sean amistosos con el medio ambiente, que el agua se reutilice, entre otros. Lo tercero son los beneficios más pecuniarios, en el caso del litio actualmente tienen algún acceso asociado, pero también con temas no pecuniarios, como oportunidades de trabajo, desarrollo y sectores que se generan a través de estas industrias. Como todo esto es anclado al territorio, la idea es que las comunidades no les afecte desde el punto de vista negativo con sus tradiciones, cultura y la mantención del medio ambiente. Desde el comienzo del proceso mismo, el comité de Corfo tiene un mandato especial de juntarse con cada una de las comunidades vinculadas al territorio para ver cómo se elabora la estrategia.
- Litio o hidrógeno verde, ¿en cuál ve más proyección?
En el hidrógeno verde vemos más posibilidad de encadenamientos asociados que en el litio. Principalmente porque en el hidrógeno verde somos un demandante muy grande como país y eso genera una ventaja enorme. En el litio, si uno quiere entrar en la cadena tiene que competir con otros y llevar, por ejemplo, las baterías a otros lugares, porque no producimos muchos autos porque no da la escala comparativamente con China o Estados Unidos. En el caso del hidrógeno verde con los productos derivados hay mucha demanda, la minería requiere mucho y al existir esta demanda local, no tienes costos de transporte. Esto implica que la fabricación de electrolizadores, la mantención o incluso proveedores que ayudan a estas empresas locales a transformarse, son cadenas en las que pensamos que el hidrógeno verde podría tener más efectos que el litio, a pesar de que éste es un insumo bastante caro y tenemos bastantes rentas asociadas.
- Respecto del litio, ¿cuál es la última información que maneja del Centro de Tecnologías Limpias?
Nosotros no podemos decir nada, principalmente porque está asociado a un fallo de la Corte de Apelaciones que está en su trámite.
- Sobre la Empresa Nacional del Litio, Albemarle ya manifestó interés. ¿Hay opciones para los privados?
Esto lo está manejando la ministra de Minería (Marcela Hernando) y el diseño de la Empresa Nacional del Litio es con los privados. La idea es cómo generar relaciones virtuosas entre el mundo público y privado para que las rentas asociadas a este recurso natural sean de beneficio para todos los chilenos y segundo, desarrollar tipos de encadenamiento para explotación rigurosa con el medio ambiente, sustentable y junto a las comunidades de otros yacimientos que existen más allá del Salar de Atacama.
- Entendiendo que la industria de la energía limpia es relativamente nueva en el país, ¿qué marco regulatorio debería aplicarse para no repetir la experiencia del cobre en Antofagasta?
La idea de los derechos y deberes. Por un lado, tienes que generar los incentivos para que las empresas puedan hacer estas reconversiones, pero al mismo tiempo subir los impuestos verdes, que hoy están a cinco dólares la tonelada y los países desarrollados están apuntando a cien dólares la tonelada. El hidrógeno verde no es competitivo del hidrógeno gris porque todavía no tenemos experiencia productiva, pero en otros países pasa a ser competitivo cuando tienes estos impuestos. Lo que tratan de hacer es que sea competitivo penalizando o tratando de forzar a las empresas a que se transformen. Tienen que ocurrir las dos cosas, los deberes, vamos a pagar impuestos verdes más altos para aquellos que contaminan, pero al mismo tiempo tener la oportunidad a través de recursos públicos para promocionar la oferta de estos energéticos.
- ¿Esta administración viene con algún nuevo trato con los emprendedores respecto de la forma y a quiénes se le entregan los recursos?
No necesariamente. Seguimos pensando que el emprendimiento es fundamental para el crecimiento y desarrollo, pero le estamos poniendo apellido, que tenga una focalización de los temas que sean interesantes para la sociedad. Que no sea solamente una forma de independizarse o generar recursos, lo cual está bien, pero además orientado a problemas que tienen que ver con la sociedad en su conjunto, como la sustentabilidad, la inclusión, de género y obviamente desde el territorio. Ya hay muchos lugares donde tienes escalas suficientes para hacer este tipo de cosas a nivel de la región con recursos que no tengan que competir entre todo Chile. Queremos darle más fuerza al margen de temáticas que a todos nos convocan.
[…] Fuente: Timeline […]